Dos días mas y finalizaba enero. Genial, un nuevo mes junto a Harry. Ya casi llevábamos tres meses, si no me equivocaba, era lo que me haría más feliz. Pero tal vez la felicidad no era la misma, tal vez la felicidad duraba poco. Harry junto con los otros chicos me obligaron a enviar una carta a la escuela de fotografía y yo había obligado junto con Danielle a Rocío a mandar una carta a la escuela de baile, a la más prestigiosa, Danielle sabía de eso. Hoy llegaba la carta si la aceptaban a Rocío si o no, en la escuela, y la mía no tenía fecha de entrega todavía. Las dos estábamos nerviosa, yo más por ella. Rocío era una gran bailarina, le gustaba mucho la música como el baile. Se merecía una oportunidad así en su vida. El buzón en la puerta había traído noticias, me acerqué a la puerta y to