—Bueno, es suficiente, la señorita necesita un respiro. —La atención de los gemelos y Rossy cae en el recién llegado, Fausto, quien al igual que su padre porta un elegante traje a su altura y cuerpo. —El de la izquierda es Gregorio, tiene un lunar en la ceja derecha, y el otro es Gregori, tiene un lunar bajo el ojo, cerca de la nariz en el lado izquierdo. —Los gemelos miran con incredulidad al joven Abbey. —Por cierto, mucho gusto en conocerte, princesa italiana, soy Fausto. —Rossy no puede evitar pensar que aquel joven, es un poco arrogante, por la manera en la que parece expresarse. —Y el antisocial que se encuentra alejado es Axel Kahler, que no te sorprenda su actitud de ser frio y sin sentimientos, lo hace para llamar la atención. —Rossy frunce el ceño, parece que aquel joven no sabe lo que ha sucedido, aunque bueno, no lo culpa no es algo que se deba ir anunciando. Pero, esto no debería ser el justificante para burlarse.
—Creo que no debería suponer lo que sucede en la cabeza del joven Kahler, Abbey. —La respuesta de Rossy hace que Fausto levante una ceja y sonría con verdadera intriga. —Si él decide ser así, es cuestión suya y de nadie más, para colmo, he visto como ha tratado de insistir en sacarle algunas palabras. Que maleducado. —Fausto Abbey, el primogénito de Benjamín Abbey mira a la recién llegada con interés, ciertamente ella, no es como otras niñas que ha conocido.
—Al menos deberías darme las gracias por mostrar las obvias diferencias entre este par de molestos. —Rossy rueda los ojos. —Es cierto lo que dicen los adultos, tienes una manera de hablar bastante elegante, para ser italiana. —Rossy siente como su pequeño tic en su ojo derecho, ¿Acaso se atrevía a decir idioteces por su origen o algo así? —No pongas esa cara, nena, deberías juntarte conmigo y no con estos niños infantiles. —Fausto toma la mano de Rossy, y deja un beso suave en el dorso de la misma, siendo esto la gota que derrama el vaso para ella.
—¿Y qué tiene que sea italiana? ¿Eso me hace inferior a ti? —Pregunta ella apartando su mano, los gemelos que siguen viendo esto, ríen sin siquiera disimularlo un poco, Fausto por su parte, solo puede encogerse de hombros ante la pregunta de la pelirroja, su tío le había dicho una vez que, la única función de las mujeres que forman parte de las mujeres dentro de la mafia solo servían para acuerdos matrimoniales, para apaciguar las turbias aguas en los territorio enemigos y ya, luego de esto, no tenían otra función, aunque hasta donde Fausto puede recordar, su tío estaba ligeramente ebrio.
—Si, quiero decir, no, tu padre también es italiano y se le debe respeto, pero, tú eres una niña, cuando seas adulta, tu único propósito en la vida será atraer bebés al mundo y ser una esposa. —Las palabras de Fausto logran hacer que el enojo en Rossy crezca de manera desmesurada, esto es lo mismo que ha dicho su hermano mayor Alessandro, han hablado del matrimonio en el futuro de Rossy cuando esta sea una adulta, pero, ella no quiere esto, haría todo lo posible porque su hermano no controlará su vida. Ni nadie, jamás.
—Stupido monello, dovresti imparare le buone maniere, non sei altro che arrogante. “Estúpido mocoso, no eres más que un arrogante, deberían enseñarte modales” —Masculla Rossy en italiano, claramente ninguno de los chicos ahí presentes entiende una sola palabra de lo que estaba diciendo, así, que lo único que pueden suponer es que, Rossy, está insultando a Fausto. Causando que los gemelos ríen, y Fausto los mire confundido. —¡Me largo de aquí y será mejor que no te acerques! ¡Stupido monello! “Estúpido mocoso” —Rossy camina hacia algún lugar lejos de los tres chicos, entre ellos, se sigue escuchando la escandalosa risa de los gemelos Novicokv.
—¿Qué? ¿Qué es lo que ha dicho? ¿Acaso ustedes dos entienden lo que ha dicho esta niña? —Pregunta Fausto hacia los molestos gemelos, quienes solo niegan con la cabeza, eso que ha dicho aquella niña, no saben que significa exactamente, pero, les hace bastante gracia. No pensar si quiera en detenerse, afortunadamente, todo lo que sucede fuera de la sala de reuniones no puede escucharse y dice versa, así que, los niños pueden ser tan ruidosos como quieran.
—Creo que quien sea que te ha dicho esto, ha condenado para siempre tu reputación con las niñas, Abbey. —Gregorio limpia una lagrima de su ojo derecho. —¿Cómo se te ocurre decirle tal cosa a una niña como esa? Debes ser estúpido. —Fausto hace una mueca, él jamás reconocía el haberse equivocado, así que piensa en que Rossy, es una loca.
—Recordare no decirle esas palabras a ninguna niña que conozca, significaría acabar como tú. —Gregori también se burla, Fausto se enoja por esto, tanto que su rostro se pone rojo, tanto como el cabello de esa loca Felicce.
Rossy Felicce, parecía ser una niña como las otras, pero, puede verse claramente que esto, no es así en lo absoluto.
Cuando Rossy se encuentra más alejada de aquel ruidoso grupo, se topa con Axel finalmente, el niño de también 13 años sigue en su mundo, ha pasado por mucho, demasiado, desde que su madre murió, con él también se fueron las ganas de vivir la vida, hacia cualquier cosa con tal de que su propio padre lo elimine, pero, lo que este le dijo que jamás haría algo como eso, no cuando aquel niño, era la única esperanza de seguir con el apellido Kahler. Rossy se acerca con cuidado, Axel levanta la mirada para encontrarse con unos hermosos ojos de verde esmeralda y lo que Rossy ve, son unos intensos ojos azules, ambos se quedan sin decir nada, pero, luego, el niño suspira, solo quiere acabar con esto lo antes posible con el fin de encerrarse en su habitación, ocupar su mente en tareas difíciles, lo que sea, sin embargo, todo lo que hace Axel es resulto de inmediato, dejándolo solo con sus pensamientos.
—Hola....Lamento si el ruido de antes te ha molestado, ¿Está bien si me quedo aquí? —Pregunta Rossy, justo como le ha pedido su padre, quiere ser amiga del joven Kahler, pero, parece que esto sería un poco difícil, aun así, ella no solo lo hacía por cumplir los deseos de Frederick, ella también necesitaba tener al menos un amigo, alguien que no pensara en casarla como sus hermanos mayores, al menos, como cuatro de estos.
—Ich bin nicht daran interessiert, mit dir zu reden, geh weg mit den lauten Zwillingen und diesem Idioten. “No me interesa hablar contigo, lárgate con los gemelos ruidosos y el idiota aquel.” —Responde Axel en su idioma natal, es decir, el alemán, pero, lo que no sabes que, Rossy es una perfecta estudiante, quien, por su propia educación y bien propio, no dudo en querer aprender más idiomas, aparte del italiano.
—Ich kann Ihnen ganz genau sagen, ich werde nicht gehen, nicht bis ich Ihr Mitgefühl habe. “Puedo asegurarte que no me iré, hasta tener tu simpatía”—Responde ella con una amable sonrisa en su rostro, Axel la mira con incredulidad, entonces Rossy se dice que ha logrado un avance, mucho, a decir verdad, aquel niño deja de portar ojos perdidos, que ahora, la observan con curiosidad, Axel ha hablado en alemán porque así lo quiere, pero, no espero que los demás fuera de la casa Kahler también lo hablaran.
—Kannst du Deutsch verstehen und sprechen? “¿Realmente puedes hablar y entender alemán?" —Rossy asiente con la cabeza, entonces el chico de ojos azules y cabello tan dorado como los mismos rayos del sol, sucumbe. —Impresionante, no pensé, eres más lista de lo que aparentas. —La sonrisa en el rostro de Rossy crece aún más, sin dejar de verse adorable, claro.
El de hoy, Rossy ha conocido a los futuros jefes de las casas aliadas, y sin saberlo, también a quienes serian sus aliados en el futuro, ella siente curiosidad por cada uno de aquellos chicos, aunque si bien es cierto que los gemelos fueron hacia ella con mucha confianza, nunca ha tenido que lidiar con eso, por no mencionar a Fausto, quien tiene una personalidad arrogante, Rossy no desea imaginar como seria este dentro de unos años, pero, quien llamo su atención desde el principio fue Axel, siente que, pueden llevarse bien, que pueden ser mejore amigos, nadie sabe, esto podría ayudarla para el futuro, sentía que así seria. Al irse a dormir, Rossy ansia que llegue finalmente el baile de la primavera que en su hogar se organizaba, podría empezar a asistir a dichos bailes, no solo a los de la casa Felicce, esto también incluía a la casa Kahler, Abbey y Novicokv.