Regañados

1348 Words
-Buenos días, mamá – dijo Abril con temor. -Buenos días Abril – respondió en tono severo, para después lanzarle una mirada igual a Seth. –Discúlpame no quisiera ser grosera, ¿cómo te llamas? –Estaba molesta, y su expresión lo demostraba sin lugar a dudas. -Seth, señora – estaba serio, sabía que no iba a ser salir bien librado de aquella situación, pero se sentía en parte responsable por la llegada tarde de Abril; además, quería aprovechar su corta estadía en Ciudad Eta, para pasar el mayor tiempo posible con ella. -Bien Seth, quisiera regañar a Abril; pero no creo que sea prudente hacerlo frente a ti, permítenos un momento. Siéntate por favor – después miró a Abril, – vamos a tu habitación jovencita. – Seth, no sabía cómo reaccionar ante aquello, quedó congelado en el lugar en el que estaba. Vio cómo Abril se dirigió a la habitación con expresión temerosa, detrás de ella su mamá; las seguía con la mirada cuando entraron a la habitación, y escuchó cómo la puerta se cerró, todo en cámara lenta. Pero no podía escuchar la conversación como la última vez, lo que lo hizo ponerse nervioso, quería saber de lo que hablaban, al menos así podría pensar en qué decir. Sólo que quedó abandonado a su suerte, y decidió sentarse a esperar. Abril entró a la habitación, esperaba que su mamá estallara como lo hizo por teléfono, pero no fue así. -Agradece que soy yo y no tu padre – fue lo primero que le dijo. -Mamá lo siento, de verdad que no me di cuenta de la hora - la madre de Abril, cerró los ojos y al mismo tiempo levantó una mano, para indicarle que guardara silencio. Dio un largo suspiro y se dirigió a la cama, para sentarse. -Es la primera vez que traes a un chico a casa, así que supongo que es importante para ti. Y si el viene a enfrentar un regaño contigo, es porque también eres importante para él – la expresión de Abril comenzó a cambiar por una sonrisa. –No significa que saldrás librada de un castigo, pero eso no será hoy – con su mano, golpeó suavemente a lado de ella, en señal de que se sentara a su lado. Abril no perdió el tiempo y se sentó de inmediato. –¿En qué momento creciste mi pequeña? –Abril sonrió. -¿Crees que papá lo hubiera golpeado? –Preguntó divertida. -Definitivamente – era la primera vez, que Abril mencionaba a su padre sin que su madre reaccionara mal. -Mamá, no tomes a mal esto; pero, ha pasado mucho tiempo y tienes que arreglar las cosas con papá, deberías hablar con él –Abril estaba aprovechando la situación. -Lo sé – su madre suspiró largo. –Ahora vamos afuera, ese chico ha de estar hecho un mar de nervios – se levantaron de la cama y salieron de la habitación. Aquel par de minutos, parecieron una eternidad para Seth. Cuando escuchó los pasos por el pasillo, se levantó del sillón de inmediato. Abril llegó sonriéndole, y en un susurró le dijo: –Todo está bien – mientras la madre de Abril venía detrás de ella. -Haré el desayuno, ¿te quedas a desayunar Seth?–Preguntó la madre de Abril, dirigiéndose a la cocina. Seth, no sabía qué estaba pasando, creyó que algo no iba bien, porque cuando llegaron estaba enfadada y ahora, le preguntaba totalmente amigable. ‘¿Qué le habrá dicho Abril?’ pensó. -Sí señora, gracias –Seth se giró a mirar a Abril incrédulo, pero cuando la vio, descubrió que ella estaba totalmente relajada. Lo tomó de la mano, lo guió hacia la barrita de desayuno que quedaba frente a la cocina, y ambos tomaron asiento. Mientras el desayuno era cocinado por la mamá de Abril, comenzaron a conversar los tres, el ambiente se relajó completamente y pronto reían sin reprimirse. Terminaron de desayunar, y Abril se levantó para ayudar a su mama a lavar los utensilios de cocina utilizados. -Dime Seth, ¿qué haces en Ciudad Eta? Abril dijo que vives en Ciudad Ni – le preguntó mientras despejaba la barrita de desayuno. -Toco con un grupo y nos invitaron a tocar a esta ciudad – se sentía orgulloso, después de todo era su sueño cumpliéndose. -¡Vaya! Entonces deben ser populares, ¿regresarás a Ciudad Ni? –Le volvía a preguntar la mamá de Abril. -Sí, y debo confesar que me alegra que toque el tema, mi vuelo sale el domingo a las 2 de la tarde, ¿podría Abril acompañarme a la tocada de esta noche? Después de todo, no sé cuándo volveremos a encontrarnos – la última frase, hizo un nudo en la garganta de Seth, que lo dijo buscando la mirada de Abril, quien cuando lo escuchó, giró su cabeza para verlo. Se hizo un silencio incómodo. La madre de Abril se quedó pensativa respecto al permiso, si bien Abril era una chica responsable, no podía pasar por alto lo acontecido hacía un par de horas atrás; pero por otro lado, ya no era una niña, y el que Seth estuviera pidiendo permiso para salir con ella, hablaba bien de él, aún y cuando se fuera a ir de la ciudad. De pronto un sentimiento de culpa se apoderó de ella, si no hubiera sido por sus problemas con su esposo, Abril se hubiera quedado viviendo en Ciudad Ni, y tal vez las cosas serían diferentes. Seth se sintió nervioso y culpable, ya había hecho que Abril llegara muy tarde a su casa, todo a causa de envolverse en sus conversaciones, y el tiempo simplemente los traicionaba, una y otra vez. Pero ese era el motivo por el cuál solicitó su compañía, le gustaba estar con ella, disfrutar de sus conversaciones, de sus brazos, de sus labios. De pronto una revelación se apoderó de su mente, la cual le hizo pensar en lo raro que sonaba, ¿se estaba enamorando de Abril? Abril se sintió incómoda y preocupada, ya había hablado con su madre y ella le había dicho que no la castigaría ese día, ¿estaba tratando de incomodar a Seth al no responder? Por otra lado, también ansiaba poder asistir al concierto, pasar más tiempo con él, seguir disfrutando de su compañía, tal vez recuperar el tiempo que habían perdido por las circunstancias, ¿pero por qué? Entonces una idea le cruzó por la mente, ¿sería una locura que se estuviera enamorando de Seth? -Está bien, pero deben respetar la hora de llegada, ni un minuto tarde, ¿de acuerdo? –Al fin el silencio fue roto por la madre de Abril. -De acuerdo – dijo Seth sintiéndose victorioso. –¿Está bien si la traigo mañana a las 9 de la mañana? –Quiso adelantarse diciendo una hora, de cualquier manera era descabellado que le dieran permiso de llegar a la hora que él había fijado, pero sería considerado como base. -¿C...Cómo? –La mamá de Abril casi colapsa en la cocina, cuando escuchó la hora de regreso. -Bueno, es que pasaría por ella a las 7 –Seth trató de justificarse, – y después de la tocada le seguimos un poco con la fiesta - seguía explicando, mientras se llevaba una mano hacia su nuca y la masajeaba suavemente. -A las 5 aquí Abril – dijo la señora mirándola fijamente. -Sí mamá –Abril sonreía de felicidad. Seth, se despidió de la madre de Abril con una sensación satisfactoria. Abril lo acompañó afuera del departamento, cerró la puerta y se puso a lado de ella. -Eso salió mejor de lo que esperaba – confesó Abril. Seth se acercó para darle un beso en la mejilla, pero antes le susurró al oído. -Tu madre nos observa desde la mirilla, no sabes todo lo que me estoy resistiendo para no besarte -Abril se tensó completamente, no por su madre, sino porque Seth quería besarla de nuevo. Él la beso en la mejilla y se alejó de ella. –Te veo a las 7. –
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD