Locas Historias Raras

Malas noticias

Abril llegó al aeropuerto de Ciudad Ni, para su sorpresa, vio a lo lejos a Augusto y a su padre; les dio una sonrisa, que no era la mejor que les hubiera podido dar. Augusto abrazó a Abril, y fue la manera en la que notó que estaba más alto; Julio también abrazó a su hija, y lágrimas comenzaron a caer.

Se dirigieron al estacionamiento del aeropuerto, mientras Abril les contaba del accidente, Augusto sacó su celular, comenzó a buscar información y ubicó el nombre del hospital donde estaban. Cuando llegaron, tuvieron que hacerse paso en medio de los reporteros que buscaban la nota, y cuando pudieron ingresar al hospital, encontró a Ingrid rápidamente.

-¡Abril! –Ingrid se lanzó a sus brazos en medio de sollozos.

-¿Cómo están? –Abril preguntó tras recibir el abrazo.

-Jacob y Jorge ya fueron pasados a una habitación, están fuera de peligro. Frank, David y Seth aún están en cuidados intensivos –Ingrid, comenzó a llorar desconsoladamente antes de poder decirle algo del integrante faltante.

-¿Y Axel? –Preguntó Abril, tomándola de los brazos.

-Lo están operando, otro vehículo golpeó la camioneta del lado en el que iba sentado y… –Ingrid se cubrió el rostro, y comenzó a llorar de nuevo tras hablar. Abril, sólo la pudo abrazar muy fuerte para tratar de calmarla.

Pasaron un par de horas, cuando salió un médico preguntando por los padres de Axel; Ingrid y Abril se pararon justo detrás de ellos, para escuchar la noticia. Él ya se encontraba fuera de peligro, pero debido al golpe, no podría caminar. Y tras oír las palabras, un silencio sepulcral llenó el ambiente.

Era ya de madrugada, cuando Frank, David y Seth, fueron trasladados a habitaciones; mientras Axel, era enviado a cuidados intensivos.

-Abril, deberíamos ir a descansar -Julio le dijo de manera dulce.

-Papá, quisiera estar aquí cuando nos permitan verlos -Abril intentaba convencerlo.

-Pero eso no será hasta mañana -Abril abrió la boca para rebatir, pero Julio prosiguió hablando; - además, Ingrid también necesita descansar - su amiga ya se había acomodado en la silla, con su cabeza sobre el hombro de Abril, incluso pudo sentir que ya estaba dormida. Abril dio un suspiro, simplemente asintió para darle la razón a su padre.

-Ingrid - le habló suavemente, moviendo su hombro con sutileza.

-¿Qué sucede? -Abrió los ojos muy apenas.

-Vayamos a casa, necesitamos descansar -Abril le sonrió con cierto pesar, porque tampoco estaba muy convencida.

-Está bien si te quieres ir, yo me voy a quedar hasta que nos dejen verlos -Ingrid respondió obstinada.

-Precisamente por eso, hasta mañana los podrán ver - intervino Julio, - lo mejor es que vayamos a casa a dormir. Mañana estarán en mejores condiciones para poder verlos, estoy seguro que les permitirán pasar a las habitaciones - habló con un poco de emoción, para que ellas se sintieran seguras, y lo logró.

Luego de haber llevado a Ingrid, Abril llegó a casa después de mucho tiempo, encontrándola tal cual la habían dejado. Subió a su habitación, se acostó llorando hasta que se quedó dormida. Augusto quiso entrar, pero su padre le dijo que la dejara sola, por el momento necesitaba desahogarse.

A la mañana siguiente que regresaron al hospital, Abril tocó la puerta de manera temerosa, al oír una voz se atrevió a abrirla lentamente, entonces se fue revelando una pareja de la edad de sus padres, así que supuso eran los padres de Seth, y una joven de 15 o 16 años.

-Disculpen, ¿puedo pasar? –Preguntó.

-¡Sí! –Al fondo se escuchó la voz de Seth, que reconoció la de Abril. Simplemente no podía creer, que ella hubiera viajado por él. Cuando Abril abrió completamente la puerta para entrar, vio que la cama se levantaba lentamente para sentarlo. Tenía vendas en la cabeza, un catéter en la mano pegado con cinta, pero él le sonreía.

-Buenos días señorita – dijo el señor cuando observó la sonrisa de Seth al verla, la señora también notó el brillo de su hijo cuando vio a Abril, y la hermana la miró con ojos amenazantes.

-Buenos días – contestó Abril, y casi con ella Seth habló.

-Papá, mamá; ella es Abril, mi novia –ella sintió cómo el calor de su cara iba en aumento, estaba totalmente sonrojada. No se lo había pedido oficialmente, pero creyó que la relación que tenían, podría ser eso.

Se escucharon varias preguntas a la vez:

–¿Por qué no nos habías dicho nada? -

-¿Qué? -

-¿Desde cuándo tienes novia? –Todas dirigidas a Seth, que sólo se limitó a sonreír.

Comenzaron a conversar todos, a hablar de anécdotas y a reír. Necesitaban ese momento de relajación, después de aquellos momentos estresantes y angustiantes.

Jacob y Jorge, salieron sólo un par de días después. David, Frank y Seth sólo una semana posterior. Pero Axel, permaneció hospitalizado un mes más. Todos los días Abril visitó a Seth en el hospital, aunque nunca estuvieron solos en la habitación.

El primer día de Seth fuera del hospital, invitó a Abril a comer. La vio llegar al restaurante, caminar hacia él con una sonrisa, mientras estaba parado junto a la mesa, avanzó dos pasos cuando Abril ya estaba frente a él, la tomó en sus brazos y la besó. A pesar de haberla visto durante una semana, no había podido disfrutar de su toque.

-Creo que estamos en un restaurante – le susurró Abril al oído después de aquel largo beso.

-Te extrañé - dijo Seth viéndola a los ojos. Después de algunos segundos, la dirigió y ayudó a sentarse, para él tomar asiento frente a ella.

-Quiero pedirte una disculpa –Abril no entendió por qué se disculpaba, pero Seth tomó sus manos. –Bueno, creo que primero debería preguntarte lo siguiente: ¿quieres ser mi novia? –

En ese momento, Abril entendió y se rio ante la situación. –Sí – le respondió.

-Lamento haberte presentado a mis papas como mi novia sin habértelo pedido antes, puedo decir un sin fin de argumentos que pasaron por mi cabeza para pensar que lo éramos, pero no hay excusas, debí haberlo preguntado –Seth se sentía solo un poco apenado, porque en el fondo le había fascinado que Abril no lo rechazó, de nuevo.

-Bueno, lo importante es que oficialmente ya lo somos –Abril, también había pensado que todas las situaciones que habían vivido, podían ser consideradas propias de una pareja, pero considero romántico y correcto que Seth lo propusiera de manera oficial.

-Y también quiero decirte, que no me hubiera gustado que regresaras a Ciudad Ni bajo estas circunstancias, sé que por algún motivo no querías volver – eso sí lo afectaba más, el accidente había cambiado en muchos aspectos a todos.

-Era por mis padres. Se separaron hace algún tiempo, pero mi mamá regresa este fin de semana, parece que las cosas al fin se solucionarán. Obviamente tengo que esperar a ver lo que sucede, pero al menos pienso aprovechar las vacaciones para quedarme aquí -Abril ya había tomado la decisión.

Julio y Sandra tuvieron un reencuentro interesante, pero su historia será contada tal vez en otra ocasión. Resumamos en: pasión, confrontación, discusión, pasión y reconciliación. Con eso, Abril regresaría a casa definitivamente. Arregló todos los trámites para continuar la Universidad en Ciudad Ni, y viajó un fin de semana a Ciudad Eta sólo para recoger sus cosas del apartamento.