Al día siguiente Adara fue despertada con el dulce aroma de flor de jazmín, su cuarto estaba lleno de flores al igual que el día anterior. El olor a jazmín era agradable, así que Adara dijo que retiraran la mayoría, pero que dejarán un ramo junto a su cama. Después de vestirse fue al comedor, donde Liam la estaba esperando. Cuando la vio él se puso en pie y apartó su silla para que se sentara y le dijo. _ Buenos días Adara, te gustaron las flores que envié a tu habitación. _ Eran hermosas, pero no deberías seguir haciéndolo, es molesto, si quieres saber cuales son mis flores favoritas te lo diré. _ No, ahora soy yo el que no quiere saberlo, me esforzaré por descubrirlo por mi cuenta, tengo paciencia y un amplio jardín con una gran variedad de flores para hacerlo. Liam tomó su lugar,