Me abandonó Cuándo estaba ciega

Con él alma destrozada.

Anabella comenzó a estudiar en un colegio para ciegos, era una persona muy inteligente, ella quería seguir trabajando, había alguien más qué se había comprometido en ayudarla, la nueva amiga, Irene; se conocieron en la misma oficina del colegio.

Anabella se sentó con ayuda de Alfonso, ella comenzó a llenar un formulario con los datos de ella.

—Buenos días, señorita. ¿Cómo es tú nombre? Eres muy bonita.Aa también tu edad.

—Mi nombre Anabella, tengo 25 años, mmm soy casada y cornuda.

Anabella comenzó a reír, a carcajadas, Irene también.

—¿Cómo dices amor?—Preguntó Alfonso.

—No me hagas caso, solo es un chiste.

Irene, se paró primero de la silla para saludar a Anabella.

—Un gusto de conocerte, acá te sentirás segura y aprenderás muchas cosas, se pueden retirar, Anabella le costó pararse de la silla, Irene la saluda muy cordial, se aproximó hacía ella, y le dijo al oído." Te entendí, él es demasiado feo, para ti." Las dos comenzaron a reír.

—Señor se puede retirar, no se olvide de pasar por la segunda oficina y dejar él primer mes cancelado.

Irene y Anabella, quedaron allí, desde ese día comenzaron a ser amigas.

—Anabella, ¡Puedes visitarme en casa! Vivo con mi madre, ella es realmente una mujer, muy sabía, además alegre.

Irene abrazó a Anabella.

—No te preocupes, te llevaré a casa, en mi coche.

Ellas se despiden, cariñosamente, Alfonso, sale de la segunda oficina.

—¡Vamos encantó! ¿Quieres qué te lleve a tomar un helado?

Anabella, sentía en su alma, la traición de su esposo, él ni siquiera imaginaba qué ella, ya lo sabe.

Alfonso recibe una llamada de teléfono, de Charlotte.

—Hola, amor mío, está noche quiero qué me lleves a cenar algún lado, y dejes a la tonta de tú mujer, pasaré por tú casa, ella no se dará cuenta jamás qué me encuentro ahí.

—Querida, te vuelvo a llamar y después te aviso.

—Hasta pronto mi amor.

Alfonso entra a la oficina, qué se encontraba Anabella.

—¿Qué pasó amor? ¿Con quién hablabas?

—Hablaba con unos de mis clientes, amor.

Anabella sabía qué cada palabra qué Alfonso le decía, era una mentira, su alma está herida.

Ellos llegaron a casa, al rato llegó Charlotte, a escondidas de Anabella, ella se daba cuenta, estaban a sus espaldas besandose, ella no los podía ver, si sentía su perfume, él qué era de su falsa amiga

—Hola, Charlotte, ¿Estás ahí?

Ella intentó esconderse, esta vez no lo hizo.

—Si Anabella, hablas con tú amiga, he venido solo un momento, para saber cómo estás, ahora trabajaré con Alfonso, tú esposo seré su secretaria, ¿Qué tal amiga? ¿Te parece bien?

Anabella, escuchaba las palabras de su falsa amiga, cómo un puñal, clavándole la espalda.

—Estoy de acuerdo, qué trabajes con mi esposo.

Charlotte, comenzó a reír a sus espadas, Anabella no la podía ver; si estaba segura de su cruel maldad.

—Ven amado mío, ahora besame, tu mujer no nos ve ja ja.

Charlotte reía, junto Alfonso, él tenía él estudio de la oficina, en aquella misma casa.

—Querida, amiga me tengo qué ir, está noche tengo una reunión con amigas.

Charlote se aproxima, hacía Alfonso, y le susurra al oído.

— Amor me vuelves loca, te estaré esperando en aquel Restaurante, no te olvides de llegar a horario, de ahí nos vamos a otro lado.

Charlotte sale de la oficina, de Alfonso.

—Amiga, querida me voy, los dejo solo, qué la pasen bien.

Charlotte, se aleja de casa de Anabella, es una mujer sin escrúpulos, llena de resentimientos rencor y odio. en la vida nunca le fué bien, ni en sus estudios, su trabajo y las relaciones sentimentales.

Aquella noche, Alfonso le mintió otra vez a Anabella

—Amor mío, me tengo qué ir me espera un cliente, tengo una reunión.

Anabella, le había dejado él número telefónico, a Irene ella llamó, justo estaba Priscila, qué la ayudó con él teléfono.

— Hola ¿Habló con Anabella?

—Si con ella, te doy mi dirección, esta noche mi esposo se ha ido, según tiene una reunión de trabajo, pero no es cierto, te cuento cuándo vengas, lo sucedido.

—En media hora estaré allí, paso por tú casa, ¿Te parece bien amiga? Anabella, trata de cambiarse muy despacio, con ayuda de su dama de compañía, los movimientos los hace con ayuda del bastón, camina por la casa despacio, hasta qué viene su amiga, la saluda y la abraza.

—¡Qué bueno qué has venido, a buscarme!, lástima no sé cómo avisar a mi esposo no estaré.

— Dame él teléfono acá, está mi celular, tómalo.

Irene lo llama, él justamente está en él restaurant con Charlotte, Alfonso sale afuera.

— Ya vengo.

—Hola soy Irene la del colegio de la oficina, voy a llevar a Anabella a casa, la quiero presentar a mi madre, para qué exista entre ellas un linda amistad, mi madre es una persona muy alegre, ¿Cómo hacemos? ¿Adónde te encuentras?, así te dejo la llave.

Alfonso, siente una incomodidad total no quiere qué lo vea Irene.

—No te hagas problema ya voy hasta allá y le dejo él duplicado de la llave.

—¡Está bien! — .contestó Irene.

Alfonso entra al restaurante, dónde se encuentra Charlotte.

— Mi amor Tengo qué salir un momento, ¿Me esperas?,debo ir a casa y dejar él duplicado de la llave. Alfonso llega a casa de Anabella, está Irene.

—¡Hola acá está!, he tenido qué dejar a mi cliente sentado, en él restaurant, te la encargo no lleguen tarde.

—Me voy chicas le dejó la llave, Alfonso le da un beso en los labios, a su esposa.

—Vamos, amiga.

Anabella sube al auto de Irene llegan, dónde vive su madre, es un barrio privado, apenas entran está él guardia.

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