No olvidó decir a sir Mortimer lo encantada que estaba de que pudieran estar juntos en lo que sería un viaje al paraíso. Hermione ya tenía puesta la mente en el Marqués. Estaba muy interesada por las cosas sobrenaturales, los amuletos y las brujerías. Ahora le quedaba muy poco tiempo para pensar en lo que iba a ponerse durante el viaje. En Islington consultó a su clarividente favorito. Este era un anciano que parecía un mago y que definitivamente tenía más clarividencia que la mayoría de sus colegas. Como buen adivino, se preocupaba por conocer mucho acerca de sus clientes y se mantenía al tanto de los chismes sociales acerca de ellos. Hermione Maltón le comentó que iba a partir en un viaje muy especial y deseaba saber qué podía ver él al respecto en la bola de cristal. El anciano n