— ¿Q-Que es lo que acaba de decir Dalila? —preguntó Leandro, en su mirada se veía el miedo y el horror. —Nada —respondió seco. Vi las expresiones de Liam y sabía que estaba nervioso. Leandro dio un paso hacia delante y Liam retrocedió. Me encontraba en el medio de ellos dos, lo que me hizo hacerme a un lado. — ¿Cómo...Como no... —vi un leve temblor en las manos de Leandro y como sus ojos se ponían vidriosos. En cualquier momento lloraría—. ¿Por qué no nos dijiste? —cuestionó completamente dolido, una lagrima recorrió su mejilla. Ohh Alá. —Por esto —lo señaló, Liam también tenías ganas de llorar, pero se contenía—. Ya han sufrido mucho conmigo, no merecían hacerlo otra vez. —Los quiero en veinte minutos en la sala...a los dos. Salió rápidamente azotando la puerta en el proceso. Me a