Más allá de tí

20.

Narrador

De regreso a casa con el ánimo decaído no lograba encontrar paz, aún tiene recuerdos del sufrimiento de su hermana por esa familia, además su corazón herido por haberse sentido utilizada, su piel se eriza y sin más las lágrimas empiezan a caer de pronto, su pecho ahora que lo nota, duele mucho, tantas cosas que le ha pasado que nada de lo que ahora ve le parece creíble.

No tiene ni la más mínima idea de que

Diego le esté siendo sincero, además de que no desea encontrarse con Jonás, pues teme que todo el autocontrol se le vaya al piso, ese hombre es uno de los seres que más odia, su hermana sufrió hasta más no poder por el abandono de ese ser, aunque Dayana también fue abandonada, evidentemente lo de ella con Diego, fue algo que realmente no sabe al fin como llamarle, ya que no fue como que

tuvieran una relación estable, pero si la marco el hecho de que ella sí tuvo

sentimientos para con él.

[…]

Dayana

Diego me muestra cara y expresiones de arrepentimiento, siento que en cierto sentido he estado siendo injusta con él, que las cosas no son como mi mente las crea, sino más bien que él es un hombre sincero, no sé si deba creer ciegamente como lo hice años atrás, y resulté con un embarazo, aunque debo ser sincera, realmente es el único hombre que en mi vida puedo estar, se volvió el dueño de cada uno de mis pensamientos, inclusive en algunos momentos que lo pienso demasiado, termino con tocarme nombrándolo, deseando que sea el quien haga todo eso en mí.

Cabe destacar, que no seré la misma persona de antes, por que ahora no soy inmadura, ni explosiva, tengo dos pequeños quienes me ven como ejemplo y debo ser lo más correcta posible por ellos.

Mañana tengo una cita con Diego, me pidió que deseaba interactuar con la niña, antes de poder decirle que él es su papá, sí, termine diciéndole todo, aunque evidentemente él ya lo había descubierto por sus medios.

En el caso de mi pequeño, por lo pronto no deseo que tenga relación con Jonás, pues evidentemente no es alguien grato para mí, pero a diferencia de Dalia, a mi pequeño si le dije que la señora que le pareció linda el día que la conoció, que ella era su abuela, que el papá de él pronto lo conocería, así que no fue difícil la explicación con él, aunque es pequeño, entiende muy bien las cosas, es muy maduro para la edad temprana que tiene.

No sé si algún momento me daré la oportunidad de pensar en el amor para mí, pues todo este tiempo a aumentado las expectativas de mi hombre ideal, quiero alguien que literalmente, esté más allá de mí, que siempre me demuestre que vale la pena todo lo que le llaman amor, quiero sentir, vibrar y que me lleven al cielo con solo una mirada, aunque no sé si la persona que busca exista, o simplemente no lo quiero aceptar y esta más cerca de lo que creo.