Elda Decidimos involucrarnos en la misión, si bien yo no me encontraba tan convencida. La sed de venganza de Nerok me hizo tomar una decisión, la cual fue sí, lo ayudaría a encontrar a la Gran hechicera. Y de paso ¿Liberar a las especies? Eso sonaba un tanto complicado, pero ya tendríamos tiempo aquí para aprender del tema. -Bien, les agradezco su entusiasmo. Su entrenamiento empezara mañana mismo por la mañana- dice la guía espiritual levantándose de su gran pupitre- Síganme por favor. Nos dirige a la puerta de salida de su despacho y le dice a Blen que nos muestre las dependencias. -Hasta mañana señores- se despide la hermosa dama. -Hasta mañana- decimos los tres al unísono. La puerta se cierra tras nosotros y nos quedamos solos junto a Blen en el largo pasillo. Levanto mi vista