La mañana llega rápidamente, y siento mi cuerpo descansado y agradecido de haberle ofrecido una cama. Me levanto y tomo una ducha rápida. Brena hace lo mismo después de mí. Grande es nuestra sorpresa que al abrir nuestro armario nos encontramos con varias tenidas de nuestro estilo brujil; todas limpias e incluso algunas eran muy elaboradas. Comprobamos y además eran de nuestra talla. Que lindo gesto pienso mientras me pruebo uno de los vestidos en tonos azules que encontré colgado. Brena elije uno amarillo. Nuestro estómago vuelve a rugir y caemos en cuenta que necesitamos alimentarnos. Salimos en dirección al comedor y en el pasillo nos encontramos con un bien oliente Nerok. -Que buen atuendo- nos dice mientras nos mira de arriba abajo – aunque esas faldas están muy largas- da una sonri