Capítulo 20. Max está en buenas manos, ¿no es así Daniela? Max apretó los puños sobre los reposabrazos de su silla de ruedas, sintiendo cómo los celos y la confusión se intensificaban, no iba a seguir discutiendo con su doctor, ahora necesitaba volver y sacar a Melisa de ahí. No sabía que tanto podría estar diciéndole a Daniela, sobre su llegada con él. Melisa, notando que los dos hombres volvían se acercó a Daniela y le susurro muy cerca del oído, -- Daniela, no sabía que te interesaba tanto el bienestar de tu jefe. Pero ahora que he vuelto a su vida será mejor que te mantengas al margen. Recuerda tu posición, solo eres su secretaria – luego se aleja con una sonrisa hipócrita, Daniela iba a responder cuando escucha las palabras de su jefe, -- ¿Todo está bien? – Max, al ver la interacc