PVO Jannick.
Llego a mi casa furioso, molesto, creo que jamás en mi vida me había sentido tan burlado como ahora, y todo por esa chiquilla petulante que se atrevió a engañarme, a dejarme esperando como un imbécil cuando ella ya se había escapado de mis manos.
No sé si reírme o llorar, esto jamás me había pasado con ninguna mujer, al contrario, son las mujeres las que ruegan por qué las lleve a mi cama, les dedique mi valioso tiempo, pero esta chica, ¡Esta maldita chica me utilizó para después irse!
_¡Rayos!.-Azoto una puerta tras otra.-Me trataste como a una basura y una vez que obtuviste lo que quisiste, te largaste maldita insolente, pues bien, ¿Quieres jugar al gato y al ratón? Acepto entonces, pero nadie se burla de mí, nadie.
No es que me guste esa chiquilla, no voy a negar que me gustó lo que pasó en el callejón, fue caliente, excitante y placentero. El mejor maldito sexo que he tenido en mi aburrida vida.
Kira, Kira.
Repito una y otra vez mientras me sirvo un trago y repito ese nombre que pensé jamás volvería a escuchar en mi vida.
Y no, no es que sea ella, la única mujer inocente y elegante que tiene mi corazón y sentimientos, esa pequeña niña que dejé hace años en Nueva York y a la que no he vuelto a ver por dedicarme a mis estudios y trabajo.
Cuando intenté volver a saber de ella, su padre siempre decía que tenía un meticuloso plan de estudios y que en su momento sería presentada en sociedad.
¿Cuando?
Pues nadie lo sabe.
Solo los rumores dicen que su padre la llegó a casar con alguien de un elevado status, un hombre que pueda ayudarla en las difíciles tareas que llevará pronto en sus hombros.
Esas palabras fueron suficientes para terminar de destruirme y rendirme con Kira Favre. Después me ahogué en trabajo, mujeres y alcohol, todo con responsabilidad por supuesto, hasta que obtuve un elevado puesto en la corte suprema de EE.UU, pero que me llegó a hartar y decidí volver a Suiza, después de recibir un ofrecimiento del mismo presidente del país, además que hay varios negocios que dejé aquí y requiero atender.
_Vaya, pero pobre puerta, ¿Que le hiciste Jannick?
_Deja de decir tonterías y ciérrala.-Le reclamo.-¿Que quieres ahora Tobías?
_Bueno, quería darte una buena noticia.-Solo si la encuentro a ella, sería la mejor noticia.-Adivina, obtuvimos el reconocimiento como el mejor buffet de abogados de EE.UU, muy por encima de los Favre & Asociados.-Me dice lanzándome la revista que nos da el reconocimiento.
Sí, esta sí es una buena noticia. Pues son años de arduo trabajo, solo para ser reconocido por ella y su familia.
_¿Y a tí que te pasa? Y no digas que nada, desde hace días estás con un humor de los mil demonios Jannick. Te conozco. Déjame adivinar, conociste a una mujer en el bar y deseas repetir.
¡Imbécil!, a veces odio que me conozca tanto, por eso lo dejé a cargo del buffet de abogados de mi ciudad y otros negocios.
_¿Una mujer?.-Me burlo.-Sabes que para mí todas las mujeres son iguales. ¿Repetir? Tendría que tener algo especial.
_Como Kira Favre.-Dice sonriente pero al notar mi mirada furiosa, se le borra del rostro.-Es un decir Jannick, lo que siempre has querido ahora lo tienes.
Pero no a ella, pienso furioso. Ella se casó y ahora hasta quizás tenga una familia y otro hombre en su cama.
_Mejor olvida a esa mujer y busca a alguien, ya es hora que sientes cabeza amigo, ya estás por los 37, no siempre vamos a ser jóvenes.
¿Buscar una pareja? Podría ser. La primera persona que viene a mi mente es una insolente que tiene el mismo nombre de ella, aunque eso no pienso decírselo a Tobías. Se burlaría si le dijera que una mujer con el nombre de Kira, me dejó con las ganas y en medio callejón sucio y mojado. No, mejor no.
_Creo que deberías seguir tus propios consejos, no siempre vas a ser un casanova.
_Bueno pues, yo ya estoy buscando a la adecuada.
_¿En un bar de dudosa reputación?.-Me burlo y él gruñe.-Mejor busca a una entre todas esas abogadas que tenemos, debe haber alguna que resalte.
_Bueno, si hay muchos prospectos, pero..
_Disculpe que lo interrumpa Sr Andersen, pero su hermana desea verlo.-Nos advierte mi secretaria por el intercomunicador.
_¿Cuál de ellas?.-Pregunto intrigado.
_La Srta Hania.
_¡Diablos no!.-Susurra Tobías moviendo las manos y con el alma apunto de salírsele.
_Dile que espere unos minutos.-Le indico antes de cortar y esbozar una sonrisa de burla.
_¡Oh Santo cielos! de nuevo ella.
_¿Ocurre acaso algo con Hania?.-Sé que no pero aún así me burlo.
_Ocurre que tu hermana no me deja de seguir, y disculpa que sea tu hermana pero es no de mi gusto Jannick.
_Y no pienso cuestionarte. Puede ser mi hermana pero no tolero sus caprichos y malcriadeces.
_¿En serio? Pensé que te molestarías conmigo por rechazar a tu hermana.
_¿Quien podria enamorarse de alguien como ella?.-Pienso en múltiples respuestas pero no hay nadie. Hania es de esas mujeres que cree que con tener un cuerpo bonito y la cabeza hueca va a conseguir un marido millonario y de prestigio, ideas que mi madre le metió a la cabeza.
_Bueno, tu madre que ha estado viniendo estos últimos días, no ha dejado de lanzarme “todas sus cualidades " Ah, y de tu hermano. Ese es otro desde que ha entrado a trabajar aquí.
Me sorprende lo que acaba de decir, puesto que no lo sabía.
_¿Cómo?
_Bueno, iba a decírtelo, o te lo mencioné el día que fuimos al bar. Tu hermano tuvo el mejor puntaje en su tesis, por eso lo acepté.
Algo me dice que no solo es eso.
_Tobías vine a trabajar no a tener dolores de cabeza.-Pero con la escapista de hace unos días, controlar mi jaqueca es imposible.
_Sr.-Interrumpe de nuevo mi secretaria.
_¿Y ahora que?
_Su hermano también esta aquí.
Otro dolor de cabeza.
_¿Que hago?.-Pregunta mientras veo como Tobias se quiere arrancar los cabellos. Supongo que después me tomaré una pastilla.
_Déjalos pasar.-Confirmo.
_Ah no, yo mejor me voy.
_Tú no te vas a ningún lado Tobías. Quiero ver qué tienen que decir, y ver si Thomas tiene pasta para ser parte de mi staff de abogados, aunque sea mi hermano no voy a aceptar mediocres.
_Bueno, vino tu madre y dijo que él era tu hermano y no podía negarle ser parte de la empresa.-Así que esa es la razón, mi madre.
_¿Osea mi madre te presionó?.-Gruño molesto.-¿Olvidas que eres el jefe cuando no estoy?
Tobías rueda los ojos y termina sentándose, después me dice que está en el área de prácticas, menos mal, ya estaba a punto de despedirlo. Lo entiendo, a veces mi madre puede ser peor que un dolor de cabeza, sobre todo cuando se jacta que es la madre de uno de los amigos del presidente de los EE.UU.
_¡Jannick hermano!.-Y aquí vamos.-Es un milagro que hayas regresado, pensé que te quedarías en..en, en ese lugar.
_Washington.-Sin duda no tiene idea de nada
_Ah hola Tobías, aún estás aquí, que bueno, así podré invitarte a la fiesta de bienvenida que nuestra madre hará para nuestro hermano esta noche.
_¿Ah?
_¿Fiesta?¿Que fiesta?.-Intervengo.
_En la que has estado evitando y nuestra madre se ha esforzado Jannick.-Ahora interviene mi hermano, ese que ahora sí parece hombre.-Cuanto tiempo de no verte hermano.
Apesar que pueda parecer un idiota, es mi hermano y no puedo aborrecerlo, pero en cuanto a negocios, si es algo que no me sirve no voy a dudar en despedirlo.
_Bueno tenemos trabajo pendiente y no sé si se pueda postergar, ¿Verdad Jannick?.-Tobías si que sabe atarme a los problemas.
_Tenemos, pero es mi madre Tobías, iremos, ¿A qué hora es?
_En la noche Jannick.-Responde Hania dándole una mirada indiscreta a Tobías. Pobre, se nota que quiere salir corriendo.
_Por cierto hermano, estoy en el área de prácticas y no es de mi agrado, mi madre cree...
_Thomas.-Sabía que no se quedaría callado.-Eres mi hermano y a menos que destaques por tu talento y no por ser mi hermano, vas a ascender, mientras demuéstrame lo que vales, porque ahora he decidido pasar una buena temporada aquí.
Creo que la noticia no le cayó nada bien a mi hermano, que tiene la boca abierta.
_Uy hermanito, ahora sí la tienes difícil.-Se burla Hania, hasta ella sabe que Thomas no dará la talla en mi empresa.-Esta vez tu noviecita no te va a ayudar.
_¿Noviecita?.-Pregunto curioso.
_Sí, noviecita Jannick, una simplona, hija de un mercader de segunda, que terminó con ella hace unos días pero que volvió como la convenida que es.
_¡¿Quieres callarte Hania?! y deja de hablar así de ella, es mi novia y mucho más inteligente que tú.
Vaya, eso sí debió doler.
_Podra ser inteligente pero es pobre, no tiene el Status que nosotros sí tenemos. Tú mereces algo mejor Thomas. Vamos Jannick ayúdame.
Ruedo los ojos, estos dos parecen peor que niños.
_No puedo opinar porque no estoy al tanto de nada, ademas que no tengo el honor de conocer a la afortunada.-O imbécil por ser la novia de Thomas.
_Descuida, ella vendrá esta noche a casa, ahí podrás conocerla.
_¡Que! ¡No nos lo dijiste Thomas!. Es una reunión familiar, no puedes invitarla, mamá no lo va aceptar.
_Es mi novia, además, Tobías va a ir y él no es más que solo un amigo de la familia.
_Sí quieren yo no voy, no tengo problemas.-Interviene Tobías para salvarse.
_Ya basta ustedes dos.-Intervengo fastidiado.-Pensé que habían madurado con los años pero ya veo que no. Pueden irse tengo mucho trabajo y díganle a mamá que iré, pero solo por un momento, no esperen mucho de mí.-Les advierto.
Al final ellos terminan yéndose y Tobías con la mirada molesta.
_Era mi oportunidad de no ir Jannick. Tu hermana no me va a dejar en paz.
_Tranquilo, solo iré a saludar a mi madre y nos regresamos, no me interesa escuchar a mi madre, mucho menos conocer a la novia de Thomas.
_Bien, solo una copa y nos vamos, prefiero mil veces estar en el bar y disfrutar de quizás mis últimos meses de soltería.
_¿Bar?.-De nuevo me viene a la cabeza la niñita escapista.
_Sí, no solo tú disfrutaste esa noche, yo también conocí a alguien y bueno intercambiamos números, no se que vaya a pasar, es muy joven para mí pero para la edad no hay barreras ,¿No?
Mejor ni respondo a su pregunta.
Tobías finalmente se va y yo me ocupo de lo que realmente me interesa, lo que he estado haciendo todos estos días, obtener alguna información sobre Kira, la escapista. No es que me interese ella, pero no puedo dejarla sin castigo. Una vez que la encuentre voy a hacerle pagar con su cuerpo hasta que me canse, hasta que sea yo quien decida si se termina o no.
Kira.
Solo tengo su nombre, no tengo más información sobre ella. Ya busqué en todas las redes, perfiles, incluso obtuve las cámaras de video de ese bar, pero nada. Todo es en vano, como si la tierra se la hubiese comido.
_Debo encontrarte.-Murmuro tratando de recuperar la agitación de recordarla en esa pared mientras la tomaba como un animal. Sus caderas moviéndose contra mi cuerpo, esos ojos oscuros y brillantes, el sonido de sus gemidos y el como decía mi nombre cuando me vaciaba en ella. No, esto me estaba alterando demasiado y hasta que no la tenga de nuevo no voy a estar tranquilo.
_Jannick, ¿Ya podemos irnos?.-Interrumpe sin ganas Tobías. Cuando miro mi reloj, ya son las 8, ni cuenta me había dado.
_Bien.-Acomodo mi saco.-No tengo ganas de ver a mi madre pero tampoco puedo ser malagradecido. Terminemos con esto rápido, tengo mucho trabajo y tú creo que vas a ir a ver a tu nueva conquista.
_¡Sí! la invité a un restaurante de categoría y aceptó. Solo no vayas a mencionarlo delante de Hania, ¿Sí?
_Descuida, me da igual con quién te revuelcas.
A mí lo único lo que me interesa en estos momentos es encontrarla y hacerle pagar a esa pequeña zorrita por lo que me hizo, pienso.
En menos de 30 minutos llegamos a la casa de mis padres y es Hania quien nos recibe con un atuendo que deja mucho que desear. Creo que un asesor de moda no le caería nada mal.
_¡Tobias, que bueno que ya llegaron! Mamá y Mily estan adentro.
_¿Y Thomas?.-Pregunto y ella rueda los ojos.
_Fue a recoger a su noviecita.-Me dice de mala manera.-Cuando la conozcas me vas a dar la razón, es una arribista, fea, sin gracia y pequeña, lo único bueno es que es algo... inteligente.
Lo que te falta, pienso divertido. Sin perder más el tiempo entramos, esperando que esto acabe lo más pronto. Lo que no me imagino, es la sorpresa que estoy apunto de llevarme y que va a hacer que una parte que desconocía de mí, se desate hasta hacerme perder el control de mi propia vida.