Salir de la habitación fue una sensación pesada, no me gusto arrastrar mis pies de esa forma porque sentí que acababa de cometer un crimen muy grande, sabía que Steven no quería nada conmigo que no fuese sexo y el hecho de que sucediera lo que sucedió con la salud de Sofía, fue solamente una cadena de coincidencias que me llevó a ponerme en un lugar en el que no debía estar. Él tenía razón, no podía mezclar las cosas. Pero tal vez lo mejor era simplemente alejarme de él. Si bien el sexo era bueno y no había nada de drama entre nosotros, no quería que mi trabajo se fuera a la borda, tampoco quería seguir pasos equivocados, no quería tomar malas decisiones. Aunque al parecer ya había tomado muchas. El frío golpeó contundentemente mi rostro, pero parecía que nada me afectaba en ese mome