Writery y el Mundo 87

5. No puedo hacerlo

Sentada bajo un árbol, me encontré a mí misma pensando relativamente en nada.

Tenía 20 minutos de esta forma y no quería continuar cazando conejos porque el concurso de escritura no dejaba de rondar mi mente.

—Fuimos invocados con un propósito —susurré pensativa—. Participar, así y sea con una historia mediocre, es lo mejor incluso para mí.

Había una cláusula que me provocaba cierta incertidumbre, y esa era la de tener un buff de protección que elevaba mis estadísticas un 5%, además, podría ganar el derecho de apelar durante las batallas en caso de que se me presentara la oportunidad.

El resumen de esta apelación era que, si las circunstancias lo permitían, podríamos hacerlo.

Pero no sabía qué historia crear, decía que la exclusividad de la historia también va a influenciar. No tiene caso tratar de reescribir una de mis historias. Debo hacer una especialmente para el Mundo 87.

Y con un gran suspiro, me puse de pie y me dirigí hacia Lessa, quien estaba sentada en la orilla del río lavando las frutas que encontramos e intentando preparar comida.

—¿El sistema de cocina es como el de un juego? —pregunté curiosa—. ¿O cómo se supone que es?

—A decir verdad, creo que solo el Mundo 87 es así, me refiero al sistema —especificó mejor y me senté a su lado para ayudar—. Pero lo demás es tal y como en nuestro mundo, incluso cocinar.

Se sentía como irnos de campamento. Cocinar fue tal y como Dylan nos lo indicó y en cuanto le vimos volver, le señalamos que la comida ya estaba lista.

Era lo más sano que había comido en siglos: un conejo asado sin ningún condimento y grasa.

Ahora no sabía qué hacer, estaba asustada, ¿adaptarme a este mundo o apuntar al concurso? Cuando lo volví a revisar, me encontré con que esta vez eran más autores los inscritos, sobre todo, vi que ya había un autor con un reconocimiento mayor al de otros.

Tras leer su nombre mi estómago se revolvió.

—No puedo hacerlo... —dije asustada—. No soy buena en esto.

Khali.MR estaba en el primer puesto.

Era normal, ¿no? Es un escritor fantástico, pero eso a mí me provoca dolor de cabeza y se me revuelve el estómago de tan solo pensar en la idea de concursar con mis historias patéticas y desechables.

Nadie me lo dijo jamás de frente, pero sabía que mis historias siempre eran un patrón repetitivo. Las ideas y tramas eran buenas, pero de nada servía porque la escritora siempre fue un asco. Pensar que me iría bien solo por ser hija de dos escritores fue un error de mi parte.

Tal y como decir que, por ser hijo de dos médicos, ya nacerías sabiendo todo del cuerpo humano.

Sentía que mis novelas eran un fiasco, me comparaba regularmente con esos autores cuyas novelas mal redactadas y con faltas gramaticales eran más famosas. Mis obras siempre se revisaban una y otra vez, contenían a lo mucho una o dos faltas, pero nada que impidiese una lectura fluida.

Mi envidia siempre estuvo en ese tipo de obras.

Pero también entendía que se trataba de algo que a mí me faltaba: El tener una conexión con el lector y el personaje.

Algo que solo un verdadero escritor podría crear, y yo era una farsa. Fue muy normal para mí saber que no tenía talento.

—¿En qué piensas, Writery?

—En nada...

Dylan me observó inconforme, así que me giré para jugar con las piedras y lanzarlas al río. No quería hablar con nadie sobre mí porque ya me sentiría demasiado patética, ahora, ¿decirlo en voz alta? Me niego.

Quiero irme de aquí; No quiero estar aquí; Estoy asustada; Quiero llorar; No entiendo este Mundo y me aterra morir; No quiero que nadie me lastime ni pelear; Quiero gritar.

Los pensamientos comenzaron a allanar mi cabeza, repitiéndose sin para en una secuencia que me destrozó la cordura. Terminé echa bolita a la orilla del río mientras lloraba y rogaba que me dejaran regresar a mi casa. Me siento patética, ¿cómo elimino este sentimiento?

Necesito deshacerme de él antes de que él se deshaga de mí.

—Disculpa, ¿estás bien?

Esa voz era nueva. Cuando alzo la mirada, me encuentro con un chico que me observa confundido, entre preocupado y curioso. Como no tengo idea de qué responder y mi voz desapareció, solo me limito a ver su físico: viste formalmente, con un traje color azul marino y una gabardina a los hombros, en su mano trae una corbata, por lo que deduje que iba a lavarla cuando me escuchó llorar.

Sus ojos son oscuros, ¿alguien podría tener esa pigmentación tan profunda? Ni siquiera puedo diferenciar su iris. Su cabello es n***o y lacio, así como su piel es perlada.

La descripción de un personaje principal ronda mi mente cuando quiero añadir una mejor descripción.

Podría decir que tiene unos ojos profundos como el abismo, recordándome a ese dicho sobre que, si miras al abismo, el abismo te regresará la mirada. Fue justo describirlo de esa forma, porque el chico que estaba frente a mí lucía imponente.

Después podría decir que su tono de voz era agradable al oído, suave, pero grave, con una sensación de que podría ser un buen locutor de planteárselo.

Quizá habría mejores descripciones, pero esta fue justo la que yo sentí al verlo agacharse a mi altura y buscar alguna herida.

—¿Lloras porque te mordió un conejo? —preguntó burlón y oculté mi mano enseguida—. No vas a morirte por eso.

¿Qué es esto? Me da miedo, tiene un tono juguetón, pero también está intrigado por mí. Quiero salir corriendo y resguardarme entre los brazos de Dylan...

—¡Woah! —me levanté de un salto cuando una ventana emergente salió frente a mí, le di aceptar porque no tenía tiempo para leer y me concentré en el protagonista principal que me encontré por casualidad.

—Vaya, parece que sí puede hablar, señorita. Pensé que era muda.

—Estoy bien... puedes irte.

—Déjeme ver su herida primero, ¿no es el deber de un hombre cuidar de las mujeres?

—Soy feminista —corté su sonrisa—. Y autosuficiente, gracias por tu preocupación, pero no la necesito.

Este no es momento para sacar tu feminista interior, Writery, me dije a mí misma.

—Y no me cabe duda que una señorita que se sienta a llorar a la orilla de un río, lo es —comentó burlón, retirando la gabardina de sus hombros—. Tome, aunque no lo parezca, nuestros cuerpos aquí pueden enfermar y por la noche cambiará el clima. No vaya a resfriarse.

Tras decir eso, ni siquiera me dio oportunidad para negarme, sino que colocó si abrigo sobre mí y tiró de mi cuerpo. Contuve la respiración apenas y noté nuestra cercanía.

Y después algo filoso y brillante pasó cerca de su rostro y se alejó de un salto unos cinco metros. Me sorprendió que pudiera moverse así, pero más sorprendente fue girarme y encontrar a un chico que venía en mi dirección.

—¿Yu...?

—Si la señorita te dice que te largues —el chico, quien todavía no identificaba bien, alzó una lanza cubierta de rayos y me emocioné sin pensarlo dos veces—. Te largas.

Y al lanzarla, se dividió en cuatro más.

Observé el nivel de ataque, era fuerte, pero lento. Mi mente pensó automáticamente en que eran mis estadísticas las que influenciaban en sus ataques. Aun así, era uno de mis personajes principales: Yu Xiao.

Pero nuestro oponente era fuerte, así que me limpié las lágrimas y me paré detrás de Yu.

—¿Cuál es tu nombre?

—¿Por qué debería decírselo a una señorita tan maleducada?

—Esta señorita va a partirte la madre si no respondes.

—Khali —desplegó su perfil de jugador y me atraganté con mi saliva—. ¿Cuál es el suyo?

Rango S.

Khali. MR es un desquiciado Rango S...

Y retiró su panel cuando quería leer sus habilidades, lo miré molesta.

—Writery.

Por unas millonésimas de segundos, su mirada dejó de ser burlona, pero su sonrisa se ensanchó más y después señaló a Yu.

—Puedo suponer que ese de ahí es su arma, ¿cierto, señorita?

Yu se preparó para atacar, pero lo detuve.

—¿Qué sabes de este mundo?

—Lo que todos saben.

—Ah, supongo que entonces sabrás sobre la cacería de esta noche, ¿irás?

Eso lo intrigó.

—No tengo interés en cazar monstruos, soy un escritor, señorita.

—Oye, acepta una pelea conmigo.

Khali me miró curioso, pero la invitación le llegó de cualquier forma y tras ver que era uno amistoso, aceptó. Pero algo llamó mi atención antes de darle inicio.

—¿Con posibilidad de apelar?

—Significa que, dependiendo de quién gane, se puede apelar para que el duelo se vuelva real —explicó con un tono más serio—. Lee las consecuencias de una apelación, Writery.

Por alguna razón sentí que me estaba regañando, pero leí con detenimiento hasta llegar a esa parte donde me entró una clase de terror.

[El Autor Khali. MR tiene posibilidad de solicitar una apelación dependiendo del resultado de esta pelea, donde:

a) Puede apelar para obtener los derechos de autor de la jugadora Writery.

b) Puede solicitar la eliminación del personaje principal de la jugadora Writery debido a que este rompe las leyes de los 189 Mundos.

Los resultados de la batalla se enviarán a su bandeja de entrada en las próximas 24 horas]

Derechos de autor... ¿va a quitarme a Yu? ¿Mis derechos de autor sobre él?

¿Podría matarlo?

[Cancelar duelo]

—No retes a nadie más de ahora en adelante —Khali se acercó a mí una vez más—. El Mundo 87 no es lo que parece, así que te recomiendo entrar en el concurso.

—No puedo hacerlo...

—Es mejor ser un artista, cantante o escritor a ser un jugador —aseguró—. Si te quedas así en algún punto vendrá alguien y va a hacerte trizas.

—Eso a ti no debería importarte.

—Sí, tiene toda la razón, señorita —volvió a adoptar ese tono burlón—. A mí no tiene por qué importarme que una señorita caprichosa como usted termine muerta en menos de lo que canta un gallo.

—¿Y eso qué?

Me oculté de nuevo detrás de Yu.

Khali me regaló una última sonrisa antes de darse la vuelta e irse sin decir ni una palabra más.

—¡Espero que la próxima vez al menos pueda pelear por usted misma, señorita!

—¡Cabrón de mierda!

Ojalá y te coma un panda.

—¿Estás bien?

—¡Yu! ¿Cómo llegaste? Ay, eres tan apuesto y hermoso, tal y como te describí. ¡Gracias por hacer de mis protagonistas un monumento, Mundo 87!

Salté a su alrededor como niña pequeña y agité los brazos de lado a lado. Podía sentir la euforia en todo mi cuerpo.

Después un signo de admiración saltó a un costado y lo toqué, la pestaña que se desplegó fue muy sencilla, similar a lo que pasó cuando invoqué a Dylan.

「¡Segunda Invocación!」

El miedo que sentías logró alcanzar a uno de tus protagonistas principales.

● Personaje invocado: Yu Xiao.

● Características de personaje: Yu Xiao es un noble descendiente del Dragón de Heras, su poder nace del rayo y cuenta con un sentido de lealtad y protección hacia su Maestra. La devoción de Yu Xiao por la Maestra Writery trasciende incluso a los 189 Mundos y mientras Yu Xiao tenga a la mano la Lanza de los Pecadores a la mano, ni siquiera el Dios del Trueno podrá frenarlo.

● Protagonista Principal: Se añadirán 200 Letter Coins a tu monedero.

● Tu nivel actual restringe las habilidades de Yu Xiao, se recomienda subir de nivel y mejorar tus estadísticas para un mejor uso en el campo de batalla.

Listo. Yu Xiao me ama.

—¡Yo también te amo! —salté a sus brazos como una madre amorosa—. Mi lindo y precioso Yu, te amo mucho, por favor no desees mi muerte.

—¡Maestra! —Yu Xiao chilló avergonzado y comencé a reír—. Mi deber es protegerla siempre, de aquí en adelante seré su lanza, así que no tema usarme.

Dicho eso, se arrodilló frente a mí y sonreí un tanto aliviada, ¿así sería de ahora en adelante? Bien, no puedo perder mi tiempo, llorar está bien, pero sumirme en una profunda negación ya es avaricia.

—¡Bien! Vayamos a subir de nivel para despertar tu verdadero potencial, Yu.

—¡Sí, la seguiré hasta el fin del mundo, Maestra!