Writery y el Mundo 87

19. Lo prometo

Lógicamente...

En la mente de un escritor siempre estaría primero la trama de su novela, después el final y al último sus personajes.

¿Era realmente así?

Pero... Es necesario.

La vida real no es una utopía, ¿por qué una novela debía serlo?

Llegué a la conclusión de que yo no era mala o egoísta, tener personajes que ayudaran a mantener la trama de la novela era necesario. Lo único egoísta que podía encontrar aquí era ellos jamás tuvieron la opción de decidir algo.

Tal y como esta novela estaba siendo escrita por otro escritor.

—Al parecer Dylan tiene mucho resentimiento hacia Writery —escuché que Letta susurraba a Yu—. Aunque parecen demasiado cercanos.

—Dylan es el primero —respondió Yu—. Él y la Maestra tienen una conexión especial y de no ser por Dylan... creo que la Maestra se perdería.

Exacto, necesitaba a Dylan, así como Dylan me necesitaba a mí.

—Perdón —me giré hacia mi protagonista principal y muy seriamente le dije—. A partir de ahora ya no serán ustedes quienes sufran, te lo prometo.

Vivirán con plenitud, serán felices, espero algún día poder liberarlos y verlos marchar sin ningún pesar.

Ya han sufrido lo suficiente en sus historias, así que no dejaré que sufran en esta también solo porque alguien más así lo decidió.

¿Quieres saber lo que una escritora es capaz de hacer por sus protagonistas?

Entonces mírame muy bien, porque aquí comienza mi propia historia, nuestra historia. Una historia maravillosa donde una pequeña escritora se convirtió en su propia protagonista.

Entonces... ¿quién era el escritor que describí mi historia? Bueno, será una pérdida de tiempo intentar descubrirlo hoy en día.

—No digas tonterías —Dylan se cruzó de brazos—. Todo fue necesario... incluso su muerte.

Me encogí de hombros.

—¿Qué fue lo que aprendiste de ello?

—Que no quiero pasar por eso una vez más, así que hazte fuerte pronto, de esa forma serás peor que una cucaracha.

Dicho eso, Dylan se fue a recopilar información y yo sonreí, agradecida con saber que mi protagonista no me odiaba y había crecido bien.

Todavía recordaba ese pequeño personaje mimado y egocéntrico que no tomaba en cuenta a nadie. Necesitaba conocer a alguien que le enseñara muchas cosas, sobre todo el valor de la pérdida.

—Voy a cuidarlos —susurré para mí misma—. A cada uno de ustedes, los cuidaré más que a mi propia vida, como si fueran lo más preciado que tengo y si algún día un bastardo se atreve a lastimarlos voy a sacarle los ojos y quebrar hueso por hueso.

Incluso romperé las leyes de los 189 Mundos con tal de salvarlos.

[¡Advertencia! Has despertado el interés de Allen, Protagonista/Antagonista de tu historia]

—¿Qué...?

[Allen se encuentra conmovido por tu determinación y te pide ser invocado por voluntad propia]

Volví a leer los mensajes, Allen...

Allen era el protagonista de su historia, pero era el antagonista del Mundo que yo había creado al ser el Guardián Infernal.

Con él ya tendría a dos Guardianes, y si venía Allen, ¿no lo haría también Keiran?

[Allen se pregunta por qué estás dudando tanto]

¿Por qué dudaba? ¡Quizá porque no sabía si iba a terminar muerta! ¿Por qué desperté su interés? Oh...

—¿Por lo que dije? ¡Madres!

Una de sus frases con las que Allen se ganó el corazón de todos fue: "Incluso si debo crear una Ruptura Dimensional, no voy a permitir que alguien te lastime, Keiran".

—Entonces ven —sonreí confiada—. Si es que quieres destrozarlo todo a mi lado.

Fue entonces que el lugar tembló tan pronto y una grieta apareció en el suelo, era color rojo, desprendía un ligero humo carmín que subió desde mis pies hasta mi cabeza y después, antes de que Byron pudiera decir o hacer algo, mi protagonista chasqueó sus dedos y una gran espada detuvo el ataque de Byron.

—Qué bienvenida más cálida, Rey del Abismo —saludó Allen.

—Lo último que quería ver era tu rostro, Rey Infernal.

—Creo que se odian —susurró Dylan.

—Yo creo que van a matarse... —respondió Yu.

—¡¿Por qué los personajes de Writery son tan apuesto?! —gritó frustrada Letta.

—¡No peleen! —ordené yo.

Pero eso no les importó porque se lanzaron al ataque y, sin previo aviso, hubo una gran explosión frente a nosotros.