Cadmia y Viola leían la sección de chismes del periódico y más tarde los informes internos del palacio. – La familia Lanlan pidió otro préstamo – leyó Viola – eres cercana a Edith, deberías encargarte. Cadmia no le prestó atención. – Lo que me recuerda, la princesa Astrid volverá este año y tu hermano mayor es soltero, sería una buena oportunidad para tu familia. Cadmia se sobresaltó – la princesa tiene catorce años y mi hermano veintiocho. Viola se mostró indiferente – es natural que el hombre sea mayor. – No tan mayor. Un guardia entró a la habitación y juntó los talones – su alteza real, el príncipe Andrés Texiran. Cadmia y Viola se levantaron enseguida para recibirlo y Andrés caminó con algo de vergüenza por la presentación, al ver a las dos mujeres las encontró muy bien vestid