Casi las dos de la madrugada, y yo llego a la mansión que pronto dejará de ser “mía” «Creo que nunca lo fue» Salgo del auto en cuando mi sombra abre la puerta. Realmente supo comportarse en la fiesta; se mantuvo alejado y discreto. Obviamente, todos sabían que venía conmigo, pero pocos se atrevieron a preguntar o decir algo en mi presencia y con respecto a la suya. «¡Nadie se atreve a decir algo en contra de la pequeña esposa del respetado y temido, Ares West!» Pienso de manera irónica. Bufo con solo imaginarme sus caras. «¿Acaso creen que Ares es un sicario?» Es decir; si es bastante malo, la verdad. Pero no al punto de ser un mafioso, ¿O sí? «Dios, ya ni yo misma sé qué pensar» La señora Eliza me recibe en el living con una notoria cara de preocupación, lo que causa que el poco c