MARION
Estaba reviviendo la misma escena que años atrás había vivido con mi madre. Ver a Vernon ir sobre esa cama rodeado de doctores rumbo al quirófano hizo que mi piel se enchinara por el miedo a no saber si lo volvería a ver con vida. Una dura realidad que no podía dejar de lado.
Sentí cómo las manos me sudaban por la ansiedad que estaba golpeando mi cuerpo. Ahora entendía porqué Bruno no le pudo decir todo éste tiempo sobre nuestra separación.
Me aferré a la mano de Bruno con mi angustia en la garganta. Permanecimos en silencio un momento mientras perdíamos de vista a Vernon.
— Todo va a estar bien Marion —me dijo de pronto Bruno al ver que dos lágrimas recorrían mis mejillas— mi papá es una persona muy fuerte, va a salir de ésta.
— No quiero que nada malo le pase —dije con un
