Nilo Esta semana fue bastante extraña, para empezar, Enrique, Monteiro y Domenico se dedicaron a exprimir hasta el último minuto libre de mis días, apenas tuve tiempo de hacer mis trabajos llegando en ocasiones bastante tarde al dormitorio y saliendo muy temprano al día siguiente, así mismo, me sorprendía llegar y encontrar a Josh dormido, no hubo una sola excepción, así como hoy tampoco lo era. Él se encontraba durmiendo en mi cama, se le notaba tranquilo y a su vez agotado, así que intenté hacer el menor ruido posible y me di una ducha para refrescarme antes de dormir, por suerte estaría libre en la mañana siendo mi recompensa para dormir unas horas extras. —Creí que no vendrías —sus brazos me rodearon bajo el agua. —Lo siento, ¿te desperté? —No, te estaba esperando. —Ha sido una