—¿Estas segura de que no quieres ir a tomar algo conmigo ? Es temprano. —Si, estamos en contacto, quedamos otro día. —Esta bien. No te insistiré. —Volveremos a vernos, no te preocupes. Te enviaré un correo con la información detallada de la casa. —agité mi brazo despidiéndolo , luego salí en mi coche después de él. —Llamar a Bob. —Llamando a Bob. —¿Hola ? ¿Tenemos comprador ? —Tenemos comprador. — repetí. Era un hecho. —Muy bien hecho, María. No vengas aquí, vete a casa. —No tenía pensado volver. Después de todo hoy es mi día libre. Solo te llamo para preguntarte por la información del cliente. Este no era el dueño, solo un intermediario. —¿Qué tiene de malo ? La mayoría son así, no siempre va directamente el comprador, eso lo sabes. ¿Qué e slo que ves de extraño en eso,