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2348 Words
―Puedo imaginar cómo se vería ese color en la señorita… Observe Anni y le sonreí un poco, ella era pequeña, estética y con una mirada pasiva, ella contrastaba perfectamente conmigo Con lo que ahora era, por lo que estuve de acuerdo con ella, mientras observaba el vestido en mis manos y lo imaginaba en mi cuerpo Muchos pensamientos vinieron a mi cabeza, como el hecho de saber que jamás en mi otra vida, aquella cuando fui Leída Moon Podría costearme aquel vestido que tenía en mis manos, o el hecho de que incluso cuando Némesis existía, pudo haber recibido palabras lindas de su dama de compañía Las dos sufríamos a nuestra manera, Leída, jamás pudo conseguir algo como eso, porque estaba segura de que Dristan, habría dicho que era un desperdicio de dinero Mientras su hermana gastaba sin parar y él indicaba que su hermana se casaría pronto y que esta podría obtener más ganancias al tener un buen esposo Mientras yo, no era más que una carga en su vida y su familia, por lo que gastar dinero en mí, era una mala inversión al final de cuenta Por lo menos esas solían ser sus palabras constantemente Mientras Némesis, ella tenía a Darla, aquella que se encargaba de indicarle que esa ropa no vendría con su cuerpo, que ella al final de cuentas No importaba que se viera de manera recatada o incluso de manera anormal, pues eso no llamaría la atención de su esposo Incluso llego a convencerla de cambiar su guarda ropa, a esas terribles prendas que no dejaban nada a la imaginación Y al final, no hacían más que humillarla, para así esa maldita mujer, sentirse más segura y lograr que Némesis jamás consiguiera la atención de Izan ―Ese es lindo mi señora… Estaba a punto de contestar a Anni, pero entonces una voz logro calar en todo mi interior; y una corriente fría me recorrió de principio a fin ―Madre… deberíamos estar disfrutando de estados unidos, de ser la princesa… de nuestra ciudad, tú ser la reina, después de todo el seguro de vida de esa mujer era tan grande que mi hermano debería estar dichoso de que por fin se haya muerto, pero perecía todo lo contrario Estaba sorprendida, estaba tan sorprendía, pero había algo más, mucho más, estaba aterrorizada, sabía que teníamos que encontrarnos pronto, sabía muy bien Que ellas y yo, tarde o temprano nos cruzaríamos, más cuando planeaba ir a aquella fiesta, más cuando se suponía que estaba haciendo esto En parte, para lograr iniciar con mi venganza, pero verla ahora mismo, saber que estaba aquí justamente frente a mí Me causo un terror terrible ¿Y si me reconocía? ¿Si sabía que era yo? Quería doblarme en dos, esconderme en cualquier lugar, correr, quería hacer tantas cosas ―Si… tienes razón, es increíble que esa basura se haya muerto y nos haya dejado tanto dinero, era una completa inútil y una molestia, pero su dinero, vaya que nos ha ayudado en demasía, es una dicha que Dris… no los haya entregado todo a nosotras ¿Cómo pueden decir esto? ¿Cómo pueden ser tan crueles? Observe a la madre de Dristan, la observe detalladamente, su vestido elegante y su collar, yo conocía ese collar Era el collar que mi madre me había heredado Aquel que había sido entregado a mi padre, para ser heredado por mí, al casarme mientras, los accesorios de Siena Eran míos también, aquellos que mi padre me había regalado, justamente como dote de mi matrimonio, indicando que me daría algo nuevo, que hiciera jugo con el collar de mi madre Yo sabía que habían costado una fortuna, y me había sentido tan feliz, pues en mi cabeza, serían una de mis reliquias familiares y sería un regalo que con gusto le daría a la hija que tendría con Dristan Apreté las manos en puño, la furia, la tristeza me recorrieron, mientras observaba como ellas se paseaban por la tienda como si nada ―Si y al fin tengo una cuñada, que está en mí misma página, una que no solo hace feliz a mi hermano, también a todos nosotros, ella era la elegida y el hecho de que esa basura inútil y estúpida esté muerta, nos está favoreciendo grandemente Ella llegó frente a mí, noté como tanto Nolan, como Izan venían hacia mí, pero yo los detuve con el gesto en mi mano, justamente cuando ella quieto de mi mano El vestido que tenía en mis manos, mientras lo observaba con una sonrisa, como si estuviese dichosa de lo que veía Entonces se lo paso a la mujer que estaba a su lado, la mujer me observo aterrorizada, como si pudiera quien era Como si sintiera terror, por el solo hecho de estar frente a mí, pero yo estaba allí, en completo silencio, mientras permitía que ella siguiese robando mi ropa Igual no importa, esa mujer había tocado aquello, y yo no quería nada que fuese tocado por alguien como ella Por lo que mientras también hacia lo mismo con Anni y esta parecía furiosa por su descaro, yo solo me quede en silencio y escuchaba sus palabras Todas aquellas cargadas de tanto desagrado y de burla hacia mí, aquellas que parecían estar orgullosa de todo lo que habían hecho Aquellas que solo las condenaba más y más y me alentaban a no tener un solo ápice de piedad contra ellas Ni nadie de esa familia ―Siena, ten cuidado con lo que dices, recuerda lo que dijo tu hermano… ―Ay mamá, no es como si alguien nos fuese a escuchar, o siquiera a entender, después de todo, las personas de aquí no hablan nuestro idioma, y eso es más molesto aún… Sus ojos tan parecidos a los de su hermano se centraron en los míos, lo hizo como si hubiese encontrado algo divertido Algo que incluso no había notado, mientras yo había estado frente a ellas todo el tiempo, en lo que hablaban de aquella pobre mujer Que le habían arrebatado la vida, por deseos de poder y dinero ―Oh… mi… te ves cómo alguien que reluce a donde va… ¿Cómo te llamas? ¿Eres de aquí? Es bueno conocer a alguien nuevo, hermoso y con mucha clase para variar, en un lugar como este… Se quedó allí, me sonreía como si hace nada, no estuviese hablando de cómo se aprovecharon de una mujer, y alababan a la nueva amante de su hermano Yo me quedé en silencio, solo la observé, lo hice por unos segundos, a la espera de que solo desapareciera de mi vista Pues estaba tan enojada, que no quería siquiera lidiar con una basura como lo era ella ― ¿Señorita? ¿No habla mi idioma? Debería saber el idioma que hay en todo el mundo, es el idioma universal, uno que no deberían saberlo todos, además… ¿Qué este lugar no está lleno de clase? ¿Qué una mujer como ella no debería saber siquiera hablar como nosotros? Qué horror, ¿ves por qué me quiero ir de aquí madre? ¿Debería decir algo? ¿Debería dejar que me insulte? Pero, no puedo decir nada, no, algo que solo sea congruente Ella no me reconocería, nunca lo haría, pero esto que siento, este enojo, este dolor, todo está en mi garganta, el miedo se había ido Pero el resentimiento, la furia, era tanta, que incluso creía que, de hablar, tal vez llegaría a decir o hacer una locura, Una que no podía hacer aún ―Mi señora… el señor y su hermano la están esperando, sería bueno que nos marcháramos de inmediato… Yo estaba allí, note como Anni, me tomo de la mano y con delicadeza me dio un pequeño tirón, para llevarme con ella En lo que note como Nova, quien estaba ahí con nosotras, solo dejaba la ropa a un lado y sin más nos seguía Lo hacía en silencio, no sin antes darle una mirada a Siena, quien parecía reconocerlo, pero luego de unos segundos negó Como si creyese que era imposible, yo camine con Anni, lo hice mientras la observaba fijamente, como si esta fuese una serpiente De aquellas a las que no podías quitarle los ojos de encima, por temor a que te mordieran Pero en cueto sus ojos dejaron de observarla, en cuanto choque mis ojos con mi hermano e Izan, la vergüenza y la impotencia me recorrió ― ¿Estás bien? Iba a ayudarte, pero tú… ―Estoy bien, de verdad estoy bien… ― ¿De verdad? Hermanita, si sientes que no puedes yo… ―Yo lo haré, lo haré bien, es solo que hoy, que hoy… ―No estabas preparada, pero me pregunto ¿lo vas a estar? ¿Qué ocurre si las cosas siguen pensando una y otra vez de maneras inesperadas? No puedes simplemente todo el tiempo esperar estar preparada para lo que pueda llegar a suceder observe a Izan, aquel que había hablado con dureza, todo mientras mi hermano molesto, refunfuño ― ¿Quieres callarte? ¿Si ella no está preparada y no lo está nunca? Entonces yo me ocuparé de todo y listo… ―Vaya… qué sencillo suena Nolan, ahora dime Némesis, ¿quieres que Nolan se encargue de esto? ―No…. No quiero, sé que aún no estoy preparada, pero yo… ―No esperaba que te estuvieras escondiendo en este lugar ¿Dristan? Un frío me recorrió, el miedo más atroz llego a mí, todo mientras los hombres observaron hacía mi espalda y una mirada fría los cobijos En lo que yo, no dejaba de temblar y tuve que ser sujetada por Anni, quien me observaba preocupada por mi reacción ―Me encontró, él me encontró… ―Señora ¿Qué ocurre? ¿Quién la encontró? ¿Conoce a ese hombre? Temblaba, ¿cómo me encontró? ¿Por qué sabe que soy yo? ¿Cómo sucedió esto? Baje mi cabeza, miles de cosas venían a mi cabeza Miles de cosas me atormentaban ―Él es… él… ―Él es el exesposo de tu mejor amiga, ¿Cómo va a saber quién eres Némesis? Izan hablo un tanto preocupado, retiró mi mano de Anni, él fue ahora quien tomaba mi mano; y me observo, sus ojos, entonces en ellos lo vi Yo soy Némesis, yo ya no soy leída, lo sabía, tenía los recuerdos de esta mujer, le había prometido que seguiría otra vida Pero ¿Por qué estaba tan ensimismada en ser la miserable Leída? ¿Por qué parecía tan aferrada a ellos? ¿aún amaba a ese hombre tan cruel? ¿aún esperaba algo de su parte? ¿Por qué cuando dijeron que él se había negado a recibir mi seguro de vida sentí que por lo menos había algo para perdonar? ¿Por qué aun sabiendo quién soy, teniendo los recuerdos, de Némesis yo seguía solo enfrascada en leída? ¿En su vida? Tal vez se debía aquellos traumas, las cosas tan terribles que viví, mis sentimientos por ellos, no se olvidarían sin más, que esto que tenía en mi pecho Esto que ahora me poseía, también era yo y por esa razón me impulsaba más y más a esa venganza tan deseada Tal vez el día que suelte por completo mi vida anterior, los recuerdos de Leída, ese día, sea cuando por fin logre mi venganza hacia esas basuras ―Yo… yo solo pensé que tal vez… él sabría que yo soy, ya sabes, que soy… ― ¿La amiga de Leída Moon? No lo creo, ese hombre, no creo que sea de los que llegan a estar muy pendiente de su esposa, como para saber siquiera cuáles son sus amistades En eso Izan, tenía un tanto de razón, Dristan jamás sabría quiénes eran las amistades que tuve en aquel entonces ―Justamente como tú… parece que tienen mucho en común La tensión se evaporó, observe a mi hermano, y la expresión cargada de molestia de parte de los dos Yo no pude evitarlo, una sonrisa surgió de inmediato, sobre todo al ver como estos dos parecía que se llevaban tan mal Pero a la vez, consideraba que tal vez, esta era la manera de llevarse; y ellos pronto volverían a ser buenos amigos Justamente como lo fueron, antes de que Némesis interfiriera en aquella hermosa amistad ― ¿Por qué estás tan enojado? Aquí nadie me conoce, nadie sabe siquiera nuestro idioma, no más que gente estúpida y ridícula, además me lo prometiste, dijiste que podía gastarme todo el dinero del seguro de esa estúpida mujer Apreté mis manos en puño, mi sonrisa se borró al escucharlos, mientras podía escuchar como la madre de Dristan apoyaba a la desvergonzada de su hija ―Es cierto cariño, dijiste que aquí tendríamos la vida que merecemos, que ahora… ―Silencio, ¿creen que no los escucharan? ¿Creen que podemos hacer lo que deseamos? Aún no somos los líderes del tratado, aún no tenemos una posición respetable, hasta entonces pisamos el suelo de otros, hasta entonces, estamos a su mereced, y más nos vale no hacer que ellos se enojen ―Qué terrible, odio eso, aún recuerdo la golpiza que te dieron, y la verdad es que me molesta aún más, ¿quién se supone que ese hombre? Observe a Izan, aquel que sonrió, y me regalo un guiño que hizo que el maldito sueño resurgiera de nuevo en mí, y mis mejillas se sonrojaran de inmediato Ese hombre era hermoso y parecía saberlo, pues parecía aprovechar sin duda cada aspecto de aquello ― ¿Quieres divertirte un poco? Lo observé extrañada, no entendía de lo que hablaba, por lo menos, no lo supe, hasta que noté, como este se acercó un poco más, mientras mi corazón latía como un loco Pues al sentir su cercanía, no sabía si era algo que afectaba por inercia a mi cuerpo, pero su olor me embriago y logre sentirme como si estuviese en las nubes Y quisiera solo un poco más, solo un poco ―Esto te va a encantar
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