Lea consiguió dormir a la pequeña rubia, la acostó en el sofá. Y se encargó de taparla bien. Ambos nos quedamos de nuevo en la cocina apoyados en la encimera, mientras mirábamos a la pequeña. - Creo que ahí pasará mucho frío ¿Por qué no duermes con ella en la cama y duermo yo en el sofá? - ¿Estás seguro, Ian? - Lo prefiero antes de que pasen frío alguna de las dos. La chica aceptó, la ayudé a llevar a la niña a la cama y después ella se tumbó a su lado. Me quedé en el sofá e intenté dormir, pero fue imposible, no lo conseguí y encima me moría de frío. Terminé levantándome y acercándome a la cama. Había un pequeño hueco entre el filo de la cama y Lea. La pequeña rubia tenía prácticamente la mitad de la cama para ella sola, me tumbe como pude detrás de Lea y me aferre a ella, muert