Ese día viernes Juan Pablo sintió que había alcanzado el nivel máximo de frustración tras su conversación con la Jefa de Programación de La Radio del Sol. Esa mujer lo sacaba de sus casillas.
Desde hacía mucho tiempo no trataba con alguien más obstinado, intransigente y absolutista. Prácticamente cada palabra que emitía en su presencia era interpretada de la peor forma. No importaba si se trataba del trabajo o de alguna conversación informal.
Desde que ingresó en esa empresa tuvo la mejor disposición para trabajar. Lo contrataron con la finalidad de darle una imagen más moderna a la emisora, de modo que fuese capaz de atraer una mayor audiencia. Específicamente, en un rango más joven.
Puso su mayor esfuerzo en la tarea, empleando lo que consideraba que eran ideas atrevidas y osadas. Per
