Allison Abrí los ojos con dificultad, se me hizo difícil poder acostumbrarme a la luz de la habitación y si bien recién me despertaba, me sentía muy cansada. Me dolía cada parte de humanidad que poseía. Mi cuerpo entero, entro enseguida, en tensión al darme cuenta que estaba sola ¿dónde estaba mi hija? Intenté levantarme y sentí como una puntada de dolor me atravesaba entera. —Joder— me queje, casi sin aliento. —Allison…— escuchar aquella voz me dejó paralizada. Me gire solo para encontrar a mi somnoliento jefe, mirarme preocupado—. ¿Estás bien? ¿Qué hacía acá? ¿Se había quedado conmigo todo este tiempo? Lo mire, entre asombrada y perpleja, enseguida se acercó a mí y sus ojos clavados en los míos, me estremecieron. Nunca había visto tal color y semejante intensidad. Mi cerebro, ba