AMARIS Era…era una sensación de tragedia la que sentía desde aquella noche. Había matado de forma salvaje a esos hombres y todo pasó tan rápido que ni siquiera tenía detalles de lo que hice. La sensación de ira fue tan grande que perdí el control, mi poder, por primera vez en mi larga vida, sentía que no tenía el control de ellos, como si alguien más me hubiera empujado a acabar con ellos. Tenía sed de venganza y aunque me arrepentía de los hechos, fue la decisión que tomé. Solo yo, nadie más. Brais tenía viviendo a la casa todos los días para hablar conmigo, pero hasta que Peter no despertara, no me podía mover de su lado. Cinco días habían pasado desde la noche que lo mordí. Sus heridas estaban sanas, Lara también se había asegurado por si tenía algo más, pero no. Peter Evans