A la mañana siguiente me levanté enérgica, me puse ropa deportiva y mis zapatillas y salí a correr a la playa como hacía antes. Solo había comido una barra de cereal y un vaso de yogur antes de salir.
Todo era igual, la gente viene a Mar del plata para las vacaciones de verano o para semana santa. Este es el finde largo se semana santa, esta lleno de turistas desde muy temprano disfrutando de la playa, solo que para mi gusto esta fresco y me enoja que los que vienen a visitar la ciudad dejen todo sucio. ESO NO VA A CAMBIAR. LOS TURISTAS SON UNOS ROÑOSOS.
Después de una hora de correr volvi a casa, mis abuelos desayunan mientras miran el noticiero yo les di un beso a cada uno y fui a darme un baño.
Un ratito después salí bañadita y vestida para acompañarlos al resto, celular en mano y mochila al hombro.
"A que hs nos vamos"
"¿No habrás venido estos días para trabajar en la cocina?. ¡No señorita!"
"Abuela, que voy a hacer acá todo el día sola"
"De haber traído a tu novio tendrías con que entretenerte" Hizo un doble guiño y mi abuelo la golpeó con el repasador. Ella solo se reía de mi abuelo y de mi cara de sorpresa al escucharla decirme algo así.
"ABUELA"
"¿Que? Ya quiero conocerlo"
"No es mi novio formal. solo salimos y ya. No sé trae a conocer a los abuelos a un hombre que no formaliza"
"¿Esas no fueron tus condiciones? Recuerdo que me dijiste que le dejaste eso en claro. No querías engancharte con nadie y ahí estás con cara de tonta, toda enamorada, pero no querés cambiar de opinión. Si no lo invitas a venir lo vamos a invitar nosotros"
"Abue, no jodas con eso. ¿Acaso no estás feliz de tenerme acá? Dejemos que Jorge siga con su trabajo tranquilo. Ya les dije, la próxima ves voy a intentar traerlo"
"¿De que trabaja? ¿Cuantos años tiene?" Pregunto curioso mi abuelo.
"Empleado de seguridad, tiene un gimnasio en el centro y tiene 39 años. ¿Feliz?"
"Hija, es muy grande para vos, casi te dobla en edad"
"Abuelo, cuando estoy con el no veo a un hombre de casi 40 años, cuando estoy con el me siento cuidada, querida, y sobre todo soy feliz. La edad es un numero"
"Un numero grande"
"Bueno, ya, hablemos de otra cosa. ¿A que hs nos vamos? Nos queda el día de hoy y hasta mañana al medio día para estar juntos"
"Es verdad pero me duele que tengas que encerrarte en el restaurante todo el día con nosotros. Este fin de semana se trabaja mucho"
"Que no te duela abuelita, yo feliz de ayudarlos. Ya sé que no pueden cerrar"
El día fue agitado, muchísimo trabajo dentro y fuera. El restaurante estaba lleno y los pedidos para domicilios no paraban de llegar. Cerramos cerca de las 12 de la noche, lamento mucho que mis abuelos tengan que trabajar tan duro a esta edad, pero se que si les pido que dejen su única razón para vivir y entretenerse no lo van a aceptar. Mañana tengo que volver y la verdad me gusto mucho pasar tiempo con mis abuelos.
Llegamos a la casa, cansados y con ganas de dormir, hoy nos dieron una paliza. En la puerta habían dos Ramos de flores, Rojas para mi y Blancas para mi abuela y en una bolsa un buen vino tinto para mi abuelo.
"Te veo mañana a la noche. Espero te guste la sorpresa"
"Me gusto. Te veo mañana grandote"
"El jet te espera a las 12 del medio día y te va a buscar un auto a las 11:30"
"Ya saque pasajes para viajar en colectivo."
"Llama y cancela preciosa"
"No puedo grandote. No importa, siempre y cuando estés ahí cuando aterrice me subo al avión"
"Trato hecho. Te veo mañana"
"Otra ves la misma cara-Dijo graciosa mi abuela- Las flores son hermosas, es muy atento y fue linda la sorpresa. Estas enamorada hija, ya deja de darle tantas vueltas al asunto"
"Si Abuela, ya es hora"
Después de un largo baño me metí a la cama, emocionada, por que por fin mañana volvía a los brazos de mi grandote.
Más que rápido paso la noche, mi abuela me despertó con una bandeja con cosas ricas para desayunar y se sentó a mi lado. Miro la pantalla del celular y son las 9:30.
"Buen día mi amor"
"Buen día abu, no hacía falta que me traigas el desayuno a la cama, vayamos abajo y desayunamos con el abueli también"
Acaricie con cariño su pelito, estaba cada vez más blanco.
"El abuelo ya se fue. Tenía que hacer unas compras para el local así que quédate tranquila en la cama y desayuna, él va a volver para despedirte"
Desayunamos juntas, no me había dado cuenta de la falta que me hacía hablar con ella, ¿Saben ustedes lo que es el amor de abuelita? Es hermoso, es como si con una inmensa Ala cubriera nuestro cuerpo protegiéndonos de todo y todos. Mi abuela me enseñó todo lo que yo se, y anteriormente lo había hecho con mi madre. Mi abuela es linda conmigo, comprensiva, compañera y sobre todo, lo más bonito, es que también es mi amiga. Ojalá Dios le dé vida muchos años más y no me deje sola, por que huérfana ya soy pero quedaría devastada si la perdiera. La ley de la vida es una mierda, pero es así.
"Abue, me olvidé de mostrarte mi sorpresa. ¿Te acordás que te dije?" aparté la bandeja y me saque la remera que tenía puesta.
"Tus tetas grandes ya las conozco, no es sorpresa" Se rio con gracia. Después se preguntan a quien salí guaranga.
"Ya se que me conoces las tetas doña graciosa"
Me di vuelta y lo vio. Se quedó unos segundos en silencio y luego pasaba sus dedos tibios por mi espalda.
"Me mata el suspenso abuela. ¿Te gusta?"
"Es hermoso, muy hermoso, pero el tatuador no me hizo justicia, estoy igual de vieja arrugada, me hubiera quitado un par de años" Mi abuela estaba emocionada, unas cuantas lagrimitas traviesas se le escaparon y luego me abrazó. Eso sí fue una sorpresa mi amor. Tu abuelo va a quedar encantado cuando lo vea.
"La última vez que vine me lleve uno de los cuadritos del que tenías en la cómoda de tu habitación, lo vi y dije 'Esta es la foto que quiero. Mis abuelos mirándose de frente tan enamorados, cómplices y sonrientes'. Y al decir la verdad, así los siento más cerquita"