Capítulo 15. Preparativos para el próximo viaje, por un futuro mejor.
El sol apenas comenzaba a asomarse en el horizonte cuando Adaia se levantó, ya habían pasado dos semanas desde que habló por última vez con el doctor, era consciente de la tarea monumental que tenía por delante. Debía organizar la evacuación de todo el campamento, un esfuerzo coordinado que involucraba a decenas de personas y una gran cantidad de suministros.
Ella acarició suavemente el rostro de sus pequeños trillizos, quienes dormían plácidamente en sus cunas improvisadas, Adaia pudo notar el gran parecido que tenían los pequeños con su padre, ambos eran muy parecidos a él, el chofer de ese tal sir Artur debía estar buscándola luego de haberla visto aquel día, ella logró escapar sin problema gracias a sus hombres y
