—Esto no es posible, Emmett. ¿Cómo pudiste hacernos esto? —gritaba mamá, a la que ya estaba dejando de importarle si las personas a nuestro alrededor nos escuchaban o no. —¿Hacerles qué exactamente, madre? Me casé, eso es todo, ¿cómo es que esto es una ofensa para ustedes? Mamá contrajo el gesto un segundo, quizás dándose cuenta que estaba dejando en evidencia ante Emmett que siempre fue su plan que yo me quedara con todo, algo que no sorprendería a nadie, yo siempre había sido su favorito, pero el motivo lo desconocíamos todos. —¡No hagas como si no supieras a lo que me refiero! ¿Qué va a decir la gente cuando sepan esto? ¡Nos convertirás en la fuente de chismes del pueblo! ¿Acaso nada de eso te importa? —Sinceramente no, la gente de Obernai es noble… Seremos solamente noticia por una