Sonrío para no llorar. ¿¡500 personas!? ¿¡En serio!? Esto me pasa por bocona ¿Qué rayos se supone que haré? No consideré que mi suegra fuera la reina de Inglaterra, a la hora de celebrar algo. Todo sentimiento de culpa se esfuma, al tomar en cuanta que de seguro mi amado esposo, debe de estar llegando a un acuerdo con la alemana. Por eso aún no aparece. Y para profesar estar locamente enamorado de mí, se está tardando demasiado. Soy mansa, pero no mensa. Sé que si entre ellos hubo esa atracción, ahí hubo fuego. Así que, echo todo sentimiento de culpa y me enfoco en lucir fácil de amar. —Estoy segura de que Mike estará encantado por esto —comento—. Además, me voy a asegurar de que esté presente para la organización. —¿Crees poder involucrarlo? A Mike no le gustan estas cosas, si lo