Dama de compañía ll

Capítulo 3

Joseph ya estaba desesperado. Todo estaba pasando muy rápido y él no entendía mucho.

—No se que diablos está pasando aquí, pero oficialmente estás muerta — le tiró el periódico en la cama para que lo leyera. —¿Has descansado? ¡Hoy es tu funeral!

Joseph tenía un tono un poco brusco y le faltaba algo de tacto, porque se sentía estresado, su mente le decía que algo raro pasaba. Helen yacía en su cama descansando, mientras en otro lugar la estaban enterrando. Algo no le cuadraba. Tenía algo de miedo porque no tenía modo de saber que pasaba, tampoco si sospechaban de él.

—Estoy viva.

—Gracias a mi.

—Gracias a ti estuve allí, y casi morí, también murió mi bebé. Pero si, estoy viva gracias a ti. Podrías hablarme sobre Richard.

—Su nombre es Richard Patton, nada más su apellido dice mucho. —el periódico más importante del país era el News Patton y la cadena de noticias más vista a nivel nacional , eso sin duda decía mucho de los contactos y conexiones que tenía Richard. —¿Que piensas hacer cuando te recuperes? Esto tiene que resolverse.

—No he pensado en eso. ¿Podría pedirte un favor?

—He puesto la comida que te traje en la nevera, también encontré algo de ropa que tal vez te quede. ¿Necesitas algo más?

—Necesito que vayas a mi funeral, quiero saber si esa persona fue a mi funeral.

—¿Es importante? —tomó algo de ropa suya del armario, unas municiones que guardaba debajo de la cama y la capucha colgada en la puerta de la habitación. — ¿Quien es?

—Su nombre es Nick, tal vez no asista, pero debo saberlo.

—¿Es... importante? —volvió a preguntar —¿vas a decirle a esa persona que estás viva?

—Si va al funeral, puede que sea la única persona que pueda ayudarme, aunque no se cómo.

—Bien, ¿pero como sabré quien es?

—El...- rió para sus adentros y se imaginó su rostro sonriéndole, pero sería todo lo contrario, Nick, al igual que los demás presentes, estaría devastado por su muerte. —No se presentaría con los demás, no si Lucas estará allí. Es demasiado orgulloso para eso. Irá cuando no haya nadie, estoy segura.

—¿Que debo hacer yo? ¿Le digo sin más que estás viva o me lo traigo a la fuerza? Lo pones muy fácil y no es así.

—Dile... dile que tienes que mostrarle algo, ¡no lo sé! No había pensado en eso.

—Bueno... Ya me inventaré algo, pero tú quédate en la cama y no hagas ningún esfuerzo.

———

Recibir aquella noticia, para Nick fue lo más inesperado que le pudo haber pasado, ni siquiera podía creerlo, nunca antes había llorado tanto en su vida, ni cuando sus padres murieron, ni cuando fue abandonado, ni cuando Helen lo dejó por otro. Si fue doloroso que el amor de su vida, Helen, lo dejara de aquella manera, peor le resultó saber de su repentina y extraña muerte. Después de él , la única conexión de familia que le quedaba era ella, y ya no estaba.

Se esperó a que saliera la última persona del cementerio y entonces entró. Llevaba consigo unas orquídeas azules , las favoritas de ella, y una carta que había escrito a Helen, aunque ella nunca la leería. Las depositó sobre su tumba mientras lloraba y le llegaban los recuerdos de tantos años juntos.

—Disculpe. —Joseph se acercó a él un poco dubitativo. —¿tiene un segundo?

-No es un buen momento, lo siento. Puede que se haya equivocado de persona.

—Se trata sobre Helen... —Sabía que la pinta que llevaba no era para nada de fiar, capucha, ropa negra, lentes, gorra. —Eres Nick ¿No?

—¿Eras su amigo ?

—Mi nombre es Joseph. —se quitó la capucha y los lentes y le tendió la mano para saludarlo. —hay algo que tengo que mostrarle y tal vez le interese, pero tiene que confiar y no hacer preguntas. Se que suena un poco loco, lo sé, pero de verdad le interesa ver lo que quiero mostrarte.

—¿Se trata sobre Helen? ¿Como sabes mi nombre?

—Ella me lo dijo, también me dijo que esperarías a que todos se marcharan, cree que eres muy orgulloso.

—Me estás tomando el pelo, a lo mejor me has seguido, no se como sabes mi nombre pero te aseguro que no estoy en un buen momento para bromas. —su corazón empezó a latir con fuerza, pensar en Helen, su funeral, aquel desconocido, buscar culpables, una razón, un motivo, para al final solo sentir rabia, ira , miedo, odio…Dolor.

Aún después de su muerte le tenía algo de resentimientos hacia Helen, por todo el dolor que lo había hecho pasar. Pero no era momento para aquello, quería buscar el día y la hora para hacerle frente a Lucas y pedirle una explicación de lo que le había pasado a Helen.

—Mira... esto sonará un poco chocante, veo que de otra manera no vas a venir conmigo. —Rascó su barquilla y jugó con la incipiente barba , preparándose para lo que iba a decir. —Helen está viva y quiere que te lleve con ella.

Las carcajadas de Nick cortaron el aire, ante aquel silencio se escuchó por todo el lugar cómo reía. Se dio media vuelta para marcharse.

—No tengo tiempo para tonterías.

—Bien, Nick te quedarás con las dudas de si digo la verdad o no. Ahora mismo estás bien, pero cuando en las noches vayas a dormir, te preguntarás si era cierto, si era posible, pero no tendrás respuestas porque no viniste conmigo. Puede que te arrepientas el resto de tu vida . —Joseph se colocó la capucha y empezó a caminar hacia donde había estacionado su coche.

Había necesitado largos meses para poder superar la ruptura con Helen, pero más que eso para sanar el daño que ella le había causado. Necesitó de cada una de sus fuerzas para hacerlo. Fueron golpes muy fuertes a su autoestima, su orgullo de hombre y su capacidad de amar. No solo había sido remplazado sino que también Helen se prostituía mientras tenían una relación que para él era estable. Suspiró profundo mientras se daba la vuelta para seguir a Joseph

¿Que podía perder?