Mateo - Me voy solo un día y medio - Bruno llama mi atención mientras viene con un vaso de cerveza - Y tú terminas con una ceja rota y el labio partido - subí mis hombros. - La vida puede ser jodida - negó. - Nathan sabe pegar bien - lo miré - Agradece que no fue la nariz, ese chico me la destrozó en dos golpes - solté una risa. - Lo recuerdo - bebi mi cerveza - Supongo que ambos lo merecíamos. - chasquea la lengua. - No supongas, es así - palmeó mi hombro - ¿Ya le contaste? - afirmó - ¿Quién falta por saber? - lo miré y luego volví mi rostro a Oliver. - En realidad, nadie - Bruno juntó sus cejas. - ¿Hablaste con Oliver? - afirme - ¿Qué te dijo? - No mucho, me observo, respiro y luego dijo algo así como - recuerdo nu