—Lo que has escuchado, estoy cansada de entrar a tu oficina y encontrarte en situaciones comprometedoras con tus asistentes. —Lo miró con absoluta seriedad—. No te comprendo, tienes una novia y la engañas. ¿Por qué tienes una relación con Selina? ¿Qué pretendes? Blake apretó la mandíbula, sintiendo la tensión en el aire. —Abuela, sabes que te adoro, pero detesto que te entrometas en mi vida privada —dijo mientras se ponía de pie, enfrentando a Dorothy—. Lo de Selina es… un asunto muy personal —aclaró—, y ve diciéndole a la mujer que contrataste que le haré la vida imposible. —Sus ojos se estrecharon con malicia al mirar a Dorothy. La abuela agarró el bastón cuando intentaba ponerse de pie, un fuerte dolor en el vientre, la detuvo en seco. Palideció, frunció los labios, luchando por recu