Mi Imperio Un Legado Maldito

Las cartas sobre la mesa

El mismo día

New York

Lily

Todavía no ha nacido el hombre que quiera intimidarme, que me doblegue, por lo mismo debo poner las cartas sobre la mesa con mi querido novio, incluso con John, porque está muy equivocado si piensa que me voy a quedar con los brazos cruzados mientras se aleja de mí, en medio de mi rabia ahora solo intento seguir las palabras de cada asesor en esta reunión, que para mí mal se está haciendo eterna, aunque mi mirada de decepción se centra en John que solo la ignora.

Tras varias horas por fin se ha terminado la reunión retirándose cada empleado presente hasta que es el momento oportuno de aclarar los rumores que han llegado a mis oídos y sin muchos preámbulos hablo.

–John necesito que me aclares los rumores que se escuchan en la empresa, ¿Es verdad que te marchas? ¿Qué trabajarás para Ronald Winchester? Contéstame, por favor con sinceridad.

–Lily esta no es la forma que deseaba que te enteres, pero es verdad, voy a irme de Wesh and Mckeson porque necesito dejar de ser la sombra de tu padre, porque adonde quiera que voy solo soy un empleado más.

–John ¡Así de fácil me lo dices! ¿Acaso no te importamos?, Mi madre se está muriendo y en lo único que piensas es en ti– le grito molesta.

–Lily ¿No entiendes que he sacrificado mi vida por cumplirle la promesa a tu padre?, Pero ahora llego el momento de seguir mi camino, además es tu turno de tomar las riendas de tu legado.

–Discúlpame por haberte arruinado la vida, porque siempre pensé que eras parte de la familia, aunque acabo de darme cuenta que solo te sentías obligado por una promesa que le hiciste a mi padre– le digo con sarcasmo.

–Lily no estoy diciendo tal cosa, porque Elizabeth y tú siempre han sido mi familia, pero debo de continuar con mi vida, además pronto me voy a casar con Olivia Winchester.

–Lo único que yo veo es que te estás vendiendo como una ramera por un maldito puesto de director en la peor empresa que puede existir, ¿Dónde está ese hombre íntegro que conocí? ¿Dónde quedó tu dignidad? ¿Dónde? –le grito.

–Lily ¿Te puedes calmar?, Porque en ningún momento dije que iba a trabajar con Ronald Winchester, solo te confirmé que me iría de la empresa, además para tu mayor tranquilidad tengo otras propuestas de trabajo, pero no me marcharé sin dejar todo en orden, he dispuesto tener todas las cuentas y balances al día porque quiero entregarte tus empresas como corresponden.

–John al parecer te has asegurado de limpiar tú conciencia, aunque en este instante no se si realmente te importo, incluso diría que más pudo tu ego que lo que sientes por mí, porque me vuelves a abandonar como lo hiciste en el pasado.

–Lily no digas tal cosa, porque siempre podrás contar conmigo para lo que necesites, mi pequeña significas mucho para mí, más de lo que te puedas imaginar.

–John yo sé muy bien lo que significó para ti, solo soy la hija de tu mejor amigo, nada más– le afirmo llena de rabia.

–¡Basta Lily! No es verdad, porque tú eres importante desde el primer día que te sostuve en mis brazos siendo una bebé, incluso todos se admiraban porque no llorabas conmigo, la verdad es que me tenías hechizado al ser la bebé más hermosa con esos bellos ojos verdes que no había forma de dejar de sonreír al verte.

John me volvió a restregar en la cara que solo soy una niña para él de la forma más sutil, tal vez es hora de soltar el pasado para seguir con mi vida, aunque aún no quiero tirar la toalla y jugaré la última carta que tengo.

John

¿Quién dijo que las mujeres son el sexo débil? No existe tal cosa, porque Lily es la prueba viviente de ello incluso, todavía estoy recuperándome de cada palabra de reclamo de ella, además que nunca pensé que lo tomaría tan mal, tal vez ha sido culpa mía por no haberme marchado hace años de la empresa, para mi pesar estoy intentando lidiar con esta pequeña fiera, aunque no hay forma de convencerla de que solo busco tener algo mío sin sentir que la lastimó., en fin sabiendo que es inútil seguir hablando con ella decido despedirme, aunque la voz de ella me detiene.

–John no quiero que te vayas molesto conmigo, además solo te pido que me entiendas, porque llego encontrándome con muchos cambios en mi vida.

–Nos vemos Lily, ahora no quiero seguir discutiendo porque ambos estamos bastante alterados.

–John ¿Vienes a la casa a cenar? Te prometo que no hablaré más del tema, además quiero que escuche mi madre de primera mano cómo fue mi primer día en la empresa.

–Acepto Lily, nos vemos más tarde.

Solo Lily puede hacerme perder la cabeza de esta forma, en fin, todavía estoy a tiempo de arreglar las cosas con mi pequeña, aunque ahora mi preocupación es Olivia, con ella debo hablar después, por lo mismo voy a asegurar la oferta de trabajo que tengo con Tomas Mellon, siendo un magnate que tiene un imperio editorial, estoy seguro que encajaré en su empresa.

Ahora me encamino hasta mi oficina para revisar todos los pendientes que tengo hasta que soy detenido por la voz de Jimmy Carter.

–John puse en marcha todos los cambios que pidió Lily, aunque me preguntaba ¿Cuál fue la decisión que tomó sobre los despidos de los asesores?

–Jimmy por ahora un paso a la vez, por ahora necesito que envíes a un empleado a la oficina de Tomas Mellon con este sobre, recuérdale que debe esperar la respuesta.

–John no te preocupes ahora mismo lo envió, otra cosa esta tu novia esperándote en tu oficina.

Enseguida continuó mi camino hasta la puerta de mi oficina donde apenas abro me encuentro con Olivia mirando todo alrededor.

–Olivia no esperaba verte tan pronto, después del almuerzo un poco particular que tuvimos– le afirmo.

–Me doy cuenta John que te he sorprendido con mi visita, pero tenemos que aclarar los términos de tu contrato con la empresa de mi familia.

–Olivia ¿Qué te hizo pensar que acepté la oferta de tu padre? Nunca en mi vida dirigiría tal empresa, porque no necesito de los favores de Ronald para tener un trabajo digno.

–John nadie dice lo contrario, pero sabes que no hay nadie mejor que tú para dirigir la empresa de mí familia, además nosotros pronto nos casaremos teniendo que cuidar lo que es mi herencia por derecho.

–Olivia te equivocas si piensas que estoy en venta, yo no seré un marido de adorno, ¿Te quedó claro?

–Creo que acabo de entender lo que sucede, todo es culpa de Lily, porque nosotros estábamos bien, pero te enteras que ella regresa y cambias drásticamente conmigo, al parecer ella llegó para revolverlo todo, la verdad es que estás enamorado de esa niñita, ¡Niégalo! –me afirma molesta.

–¡No metas a Lily en esto! La verdad es que nuestro compromiso desde hace mucho tiempo dejo de existir y la única culpable eres tú al permitir que tu padre interfiera en nuestra relación– le aseguro furioso.

–¡Vete a la mierda John! ¡Quédate con tu maldita niñita! Porque una vez que cruce esa puerta tú serás parte de mi pasado, ¿Entendiste?

–¡Lárgate Olivia! Porque este que está aquí no es tú títere– le grito mientras se retira.

Tengo unas ganas de romper todo a mi paso, porque siento que me quema la cabeza de la rabia, la ira de escuchar semejantes barbaridades y sobre todo de inventar esa estupidez sobre Lily, yo no estoy interesado en mi pequeña porque no hay forma de verla de otra forma, no puedo verla como una mujer, aunque es una hermosura, ¡Demonios! ¿Qué me está pasando? Lily podría ser mi hija, además no puedo traicionar el recuerdo de Edward, ella es prohibida para mí me grita mi interior.

Lily

Hay una de las cosas que aprendí con los años es saber que es inútil hablar con un hombre cegado por su orgullo, puedes despojarlo de todo menos de su actitud de superioridad porque se sienten inseguros, en fin, sabiendo que puedo voltear el juego a mi favor, voy hacer lo que este en mis manos para que John no deje la empresa, empezando ahora, por lo mismo lo tengo a Jimmy Carter aquí en mi oficina.

–Jimmy necesito que me indique con que empresas John está negociando su incorporación porque quiero asegurarme que pueda obtener el puesto que desea tener en ellas– le explico.

–Lily no es necesaria su intervención además que John no necesita de su ayuda para obtener el puesto de director donde esté interesado en trabajar.

–Jimmy quiero los nombres de las empresas, ¿Lo sabe?

–Lily la única empresa en la que está interesado John, es la de Tomas Mellon, el sujeto tiene un imperio editorial, incluso escuché que piensa retirarse del puesto de la gerencia, por lo mismo necesita de alguien como John para asumir la dirección.

–Mire la forma de conseguir una cita con Tomas Mellon lo antes posible, porque voy a ocuparme del tema personalmente.

–Lily me parece que se está tomando demasiadas molestias por John, si usted gusta puede encargarme del tema.

–Me gusta ocuparme de los temas importante y este merece toda mi atención, ¿Quedo claro?

John Mckeson no voy a permitir que nos abandones, porque nadie puede ocupar tu lugar, uno que tienes por derecho, además que estoy cuidando mi legado como siempre me lo pediste.