—Y, ¿Bien? —Bien, ¿Qué? Replico a Valeria de manera serena fingiendo demencia. Esta entonar los ojos. Ambas estamos tomando algo sentadas en el ático de Elliot. La verdad, ya me estaba haciendo falta hablar con ella. —A ver, o te hiciste un tratamiento con sanguijuelas o ese chupetón en el cuello que intentas disimular con corrector, te lo hizo Elliot. Resoplo ante sus palabras. Le doy un trago a mi copa. —Han sucedido cosas —espeto de manera escueta. Habían pasado tres días desde mi segundo encuentro con Elliot y caímos en una dinámica más cercana. Las últimas dos noches hemos estado compartiendo la cena y tiempo juntos. Sin embargo, no hablamos de lo que estaba sucediendo entre ambos, Solo sé que he dejado la habitación para compartir la de Elliot. Es extraño, antes teníamos