MUTED

20.

Jules permaneció despierto hasta ya muy entrada la noche, se sentía incómodo.

Volteó a ver a Dorian y pudo ver cómo este dormía a pierna suelta, plácidamente.

Jules sonrió y se puso de pie, entonces se quitó la pijama y se puso unos pantalones deportivos, luego se dirigió al gimnasio de la mansión.

James quien se hallaba en la oficina terminando de revisar unas licitaciones vió pasar al muchacho entre la oscuridad del pasillo, así que se levantó de la silla y se quedó muy quieto pensando.

Entonces vió pasar también a Dorian siguiendo al otro.

Extrañado por aquel atípico comportamiento en ambos muchachos, decidió ir a ver qué se traían entre manos, ya que no le causaba gracia que estos hubiesen planeado ir a follar de contrabando en su casa, teniendo en cuenta que ellos tenían donde hacerlo en la privacidad de su habitación.

Reparó en que los dos se dirigían al gimnasio, apenas iba a reprenderlos cuando Dorian habló en voz alta, entonces James guardó silencio y espió a los muchachos con la intención de interrumpirles si estos se ponían calientes.

- ¿No puedes dormir?.

Le preguntó Dorian.

Jules negó y se subió a la barra para hacer abdominales colgando de ella.

Dorian fue a sentarse cerca observando a su novio.

- ¿Quieres contarme el motivo?.

Le preguntó él.

- En... En realidad, no lo sé...

Respondió Jules con dificultad por el esfuerzo.

Dorian se recostó en el suelo.

- Lamento haberte despertado, no fue mi intención.

Mencionó Jules.

- No pasa nada... Además, me hubiese dado cuenta de que no estabas. Me gusta abrazarte... Me haces sentir tranquilo y seguro.

Reconoció Dorian.

Jules entonces dejó de hacer lo que estaba haciendo y se acercó al otro sentandose a su lado.

- Yo también me siento mucho mejor estando a tu lado. Tal vez los demás no lo noten, pero me has salvado de mi mismo.

Gracias a ti, ahora puedo hablar... Bueno, siempre he podido...

Explicó Jules.

Dorian sonrió.

- Mi papá no entiende lo importante que eres para mí, el cree que esto es algo pasajero.

Que estoy experimentando con mis preferencias y así, pero el no comprende la magnitud de lo que siento por ti.

Cuando Bradley te disparó... Yo, sinceramente sentí que moría.

Si algo te hubiese sucedido, yo no sé que hubiese hecho con mi vida.

Eres lo más importante en toda mi existencia Jules... Te amo más que a nadie en este mundo.

Le dijo el joven.

Jules entonces le sujetó de la mano derecha.

- Yo también te amo con toda mi alma, cuando Brad te apuntó sentí exactamente lo mismo que tú.

Que mi vida se me iba contigo...

No puedo estar sin tí.

Es extraño como las cosas se fueron dando entre nosotros, jamás imaginé que terminaría enamorándome de un hombre.

Y mucho menos que fuese con uno con quién quisiera pasar mi vida entera.

Y es una pena, nadie nunca se queda con su primer amor, esa es una realidad.

Le dijo Jules muy abatido.

Dorian se incorporó presa del pánico.

- ¿Por qué estás tan seguro de que tú y yo vamos a terminar?.

Le preguntó.

Jules entonces encogió los hombros y luego miró el suelo.

James comprendió que los jóvenes no planeaban hacer cosas indebidas en su gimnasio, así que decidió no continuar invadiendo la privacidad de ambos.

Se encaminó hacia su oficina y se quedó pensando en lo que aquellos dos estaban hablando, se dió cuenta de que Dorian parecía estar más enamorado de Jules, que el otro de él.

También reparó en que ambos estaban muy enamorados y hasta cierto punto comprometidos uno con el otro.

Lo que le preocupaba era lo que Jules le había dicho a su hijo, que nada es para siempre y ya estaba dando por sentado que lo de ellos no duraría.

La expresión de miedo en el rostro de su hijo lo dijo todo...

Días después, Dorian y Jules se encaminaron a la cafetería más cercana al campus.

Jules entonces fue a sentarse mientras el otro iba a comprar algo para beber y comer.

Luego de un rato, Dorian regresó con unos bagels con Salmon y queso crema y un par de smoothies de mango.

Fue a sentarse justo al frente de Jules y luego le miró detenidamente.

- Gracias Dorian.

Dijo Jules y luego tomó el vaso de vidrio y empezó a beber el smoothie.

- De nada, se acerca Navidad... Cada año mi padre y yo, nos reunimos con el resto de la familia en Aspen.

Supongo que lo lógico es que este año tu mamá y tu vendrán...

Estaba pensando, que... Sería mejor si tú y yo, nos quedamos en un lugar aparte de con nuestros padres y familiares.

Ya sabes, para tener más privacidad.

Últimamente nos hemos vuelto muy... Ruidosos al hacer el amor.

Explicó Dorian echando a reír por lo bajo.

Jules asintió al estar de acuerdo.

- Me parece bien.

Se limitó a responder.

Entonces Dorian echó una rápida mirada a un libro que el joven había dejado sobre la mochila.

- ¿De que va?.

Le preguntó de repente, haciendo que Jules girara la cabeza para ver qué le señalaba el otro.

- Ah... Si, es Mecánica Cuántica... Me recomendaron mucho leerlo...

Mencionó Jules sonriendo.

Al terminar de comer, cada uno se dirigió a sus respectivas clases.

Mientras tanto, Dorian se hallaba en su clase de Isomería cuando de repente entró el profesor Clapton, de dicha materia seguido por un precioso muchacho.

Era de estatura media alta, ya que debía de medir casi el metro ochenta.

Era muy rubio y tenía un cuerpo muy bonito.

- Jóvenes, les presento a Logan Step, se nos va unir el resto del curso. Viene de Inglaterra, así que denle la bienvenida y apoyenle con ponerlo al corriente, Sr. Step, por favor tome asiento junto con el señor Harsh.

Dijo el profesor.

Logan caminó hacia el lugar señalado por el profesor.

Al tomar asiento el muchacho miró a Dorian con interés.

- Hola...

Le dijo él mientras tomaba asiento.

Dorian le dedicó una sonrisa torcida y luego sacó su laptop.

- Si me pasas tu correo, te enviaré todo el temario...

Respondió el joven.

Logan inmediatamente asintió y le escribió su correo en sobre una hoja.

- Tu acento se parece un poco al mío.

Observó el muchacho sonriendo.

Dorian asintió sin despegar la mirada del monitor.

- Si, pasé gran parte de mi vida en Londres... Y otras veces en Zúrich o París.

Explicó él.

- ¿De verdad?... Wow, y ¿Eso?.

Quiso saber Logan.

Dorian entonces le miró fijamente y contempló los preciosos ojos verdes del chico.

- Es... Es una larga historia.

Se limitó a responder.

Al terminar la clase, Dorian fue guiandole por la universidad.

Al salir Jules del laboratorio, vió a Dorian con ese precioso muchacho y sintió curiosidad, así que se acercó a ellos con expresión aburrida.

- Ah... Logan, te presento a Jules... Es mi... ¿Que te ocurrió en el ojo?.

Le preguntó Dorian al otro apenas le vió.

Jules entonces echó la cabeza atrás para despejarse el rostro del cabello, y luego se llevó la mano al rostro.

- Ah si... Tuve un pequeño accidente en un experimento.

No es la gran cosa.

Se limitó a explicar, luego estiró la mano derecha hacia Logan y se la estrechó.

Logan en cambio miraba asombrado la perfecta simetría en las fracciones de Jules, y su impresionante físico.

- Un placer.

Dijo el joven.

Jules le sonrió levemente y luego miró a Dorian.

- Viene de Londres, hoy es su primer día.

Le dijo él.

Jules asintió y luego fue a tomar asiento en una banca cercana.

- Hace rato ví al señor negocios pasar en compañía del director. Supongo que ha venido a supervisarnos...

Me estresa mucho que nos trate como si estuviesemos en la secundaria.

Se quejó Jules.

Dorian se sentó a su lado y Logan les imitó.

- No hemos hecho nada malo y nuestras notas son excelentes. No veo por qué deberías sentirte así... Mira, hablando del rey de Roma.

Dijo.

Los tres jóvenes vieron como James se dirigía a hacia ellos con una expresión muy seria.

- Ustedes dos... Muy bien. Estoy muy contento con los dos, y para festejar... Les dejaré elegir el destino de dónde pasaremos las vacaciones de invierno.

Les dijo y luego extendió la mano hacia Logan.

- Papá, el es Logan, Logan... El es mi papá.

Le explicó Dorian al recién llegado.

Logan sonrió tímidamente.

- ¿Y bien?... ¿Ya han terminado con sus clases o aún les falta?.

Les preguntó.

Los tres asintieron.

- Acabamos por hoy.

Anunció Dorian mientras Jules parecía estar quedándose dormido sentado.

- ¿Que les parece si vamos a comer? Pietro ha preparado unas deliciosas langostas. ¿Por qué no invitan a su amigo?.

Les sugirió James.

- ¿Vienes?.

Le preguntó Dorian al muchacho.

Este apenas iba a negarse educadamente cuando de repente Jules se puso de pie y tomó la mochila de Logan y también la de Dorian.

- Eh...

Dijo el joven para luego ponerse de pie y seguir a los muchachos hasta la camioneta.

Al llegar a la impresionante mansión de los Harsh, Logan no pudo evitar mostrar su asombro.

Entonces ingresaron y Ana ya les esperaba en el comedor formal, le presentaron al joven y así pues todos tomaron asiento.

- Así que eres londinense.

Observó James.

- Eh... Si, si. He venido a estudiar aquí por qué me importaba mucho cambiar de aires.

Además, el nivel académico de esta universidad es uno de los mejores que hay en todo el mundo.

Quería entrar a Harvard, pero... Obviamente no me aceptaron.

Reconoció el.

- Dorian estudió un tiempo en Harvard, pero le expulsaron tiempo después.

Y a Jules le ofrecieron una plaza pero al final optó por otra opción.

Le dijo James.

Logan miró a Dorian sorprendido.

- ¿Por qué te expulsaron?.

Le preguntó, haciendo que Jules contuviera una carcajada.

Dorian le dió con el codo disimuladamente y el joven se puso muy serio.

- No quiero hablar de cosas tristes mientras comemos.

Se excusó Dorian mirando a su papá y luego a Ana.

- También para mí es muy triste que Jules haya decidido no ir a Harvard.

Terció Ana mirando a Jules.

- Ya olvídalo mamá.

Respondió Jules con fastidio.

- Bueno, ya. Referente a lo de las vacaciones de invierno, ¿Tienen alguna sugerencia?.

Les preguntó James.

- Pues... Pensábamos que iríamos a Aspen como cada año.

Respondió Dorian.

Jules parecía más entretenido con su langosta que en la conversación.

- Pensé que querrían pasar las fiestas en algún lugar lejos de las tediosas críticas familiares.

Además tu abuela aún no parece digerir tu noviazgo con Jules.

Mencionó James haciendo que Logan mirase a ambos muchachos totalmente sorprendido.

- ¿Son novios?.

Les preguntó a los dos.

Dorian asintió.

- Creí que eran hermanos.

Dijo luego.

Jules detectó el tono de decepción en la voz de Logan e inmediatamente le miró fijamente.

- Somos hermanastros, su mamá está casada con mi papá y el y yo somos pareja, de hecho vivimos como tal en la casa de huéspedes.

Por qué mi papá no nos dejar ir más lejos...

Tiene la ligera sospecha de que soy mala influencia para Jules.

Aclaró Dorian de buen humor.

Entonces Logan miró a Jules a los ojos y este inmediatamente le lanzó una advertencia muy clara con la mirada.

Dorian era suyo, y no pensaba dejarle libre ni fácil el camino al otro.

Logan en cambio sonrió casi de manera imperceptible, lo suficiente para que Jules lo notara.

A el le gustaban los retos, y se había interesado en Dorian, quien se había vuelto un reto para él.