Juliana Muñoz Al día siguiente por la mañana, me vestí con un lindo palazo color rosa y una blusa semitransparente color blanco, zapatos de tacón negros y me puse labial rojo intenso. Para mi suerte mi padre no había dormido en casa, lo más seguro es que estaría con Patricia y Alan aún no despertaba así que mi desayuno se tornó tranquilo. Después fui directo a la cochera donde Demetrio estaba lavando los coches, se veía terriblemente sexy, traía puesto sólo unos vaqueros, sin camisa, el sudor en su piel hacía que ésta brillara de manera exquisita a mi vista. Sentí como un cosquilleo inundo la parte baja de mi vientre. En cuánto me vio, dejo de lavar el auto para ponerse una camiseta de tirantes blanca, esa era señal de que aún estaba enfadado, me acerqué de manera acechante y con mirad