Al entrar al edificio por la puerta del estacionamiento, los trabajadores se me quedaban mirando más de lo que deberían, incluso algunos cuchicheaban sin ningún disimulo, logrando que me sintiera extremadamente incomoda.
¿La razón?
Jayden.
El pelinegro caminaba a mi lado muy despreocupado de la vida, ignorando a todas aquellas personas que tenían los ojos sobre nosotros. Me pregunto, qué se estarán imaginando al verme junto con el jefe de personal y una bolsa con la marca Chanel en mi mano, era evidente que yo no tenía como comprarme alguna prenda de marca, de hecho, esos tacones eran lo más costoso que alguna vez había tenido en mi vida, de eso estaba segura.
- ¿Crees que estamos llamando la atención? –pregunté por lo bajo mientras esperábamos el ascensor, no quería que las personas
