Cuando le conté a Maciel parte de la historia que me contó Elijah y como fue que se quitó la vida, las cicatrices, pensó exactamente lo mismo que yo ¿Soy esa persona o no?.
—El policía puede ser de ayuda, era su mejor amigo.
—Agente— le aclaro —¿Por qué no usamos mis métodos?.
—Bueno, Ben parece un hombre manipulable y siente odio hacia Elijah, lo vi claramente la última vez.
—Elijah también es manipulable— le digo.
—Pero, tienes algo con él.
—Dame el número.
Saco mi celular y escribo el número que me dio Maciel, no sabía que aún conservara su tarjeta, creo que yo tire la que me dio.
—Diga.
—Hola, soy Keres.
—¡Keres!, Hola, creí que nunca marcarías.
—Ya somos dos— le digo —Quiero hablar contigo de algo, pero quiero que sea en persona.
—Sí, claro, cuando quieres verme.
—¿Puedes ahorita?.
—Claro, ¿Dónde nos vemos?.
—Estoy en el hospital, hace unos días tuve un accidente, asi que estoy hospitalizada.
—¿Te encuentras bien?.
—Sí, nada que unos días en el hospital no solucionen.
—¿Estás en el hospital donde trabaja Maciel?.
—Sí, habitación 208.
—Ando cercas, llego en un momento.
—Aquí te veo.— cuelgo.
Me acomodo en mi lugar y entra una enfermera con otro ramo de rosas.
—Keres, pronto tu habitación será una florería.
—¿Es de la misma persona?.
—Sí— revisa la tarjera —El magnate señor Monroe o tu prometido, como dice la tarjeta.
—Gracias por traerlas.
—Ni lo, menciones, es un escape, hoy hay más pacientes que los demás días.
—Neuro está tranquilo— dice Maciel.
—Lo bueno, porque no nos daríamos abasto.— suspira —Tu comida te la traerán en una hora, me retiro chicas que el trabajo no para.
—Tienes razón— dice Keres —Urgencia, platícame todo ok— me da un beso.
Salen las dos y me quedo mirando los mensajes que me ha mandado Elijah, cada uno pidiéndome perdón, otros preguntándome como estoy, otros simplemente diciéndome que es un idiota, pero tenía que saber su pasado, entre otras cosas que faltan de decirme.
Cosas que no sé si quiero saber, lo único que se es que me casaré con el sí o sí, ya sea por venganza o por algo más.
—¡Keres!— me dice Ben —Traje flores, pero veo que alguien se adelantó.
—Gracias por las flores, son hermosas.— le digo —Siéntate— le hago un lugar.
—¿Para qué soy bueno?.
—Elijah me hablo de Ana o Keres, me dijo que eras su mejor amigo.
—Sí, desde siempre, incluso cuando ella no quería, incuso, lo fui cuando se convirtió en Keres.
—Su madre la vendió.
—Sí, me enteré demasiado tarde.
—¿Su familia sabe?.
—Hace unos años Cristal les contó, lo aceptaron con el tiempo y la culparon por su muerte, Cristal tenía muchas deudas, no en muy buenos sitios, creo que eso fue lo que impulso a que la vendiera.
—Nada justifica que vendiera a su hija, si Elijah no la comprara terminaría en el mercado n***o en la trata de blancas.
—Lo sé, se le hizo fácil dar una vida por tres, o pagaba o morían sus hijas, las tres, gracias a Elijah que la compro, p**o su deuda y salvo la vida de tus hermanas.
—¿Piensas que soy ella?.
—Lo siento, solo es que se parecen mucho, me es difícil no hablar asi.
—¿Qué paso después?.
—Cristal invirtió todo el dinero que le quedo y les dio lo mejor a sus dos hijas, aún trabaja con Elijah a pesar de que tiene mucho dinero, no tanto como él pero es millonaria.
—Todo a costa de su hija, sabías que la madre de ella sabía donde estaba, todos esos años.
—Estaba ahí la noche que lo dijo.
—Ella y la exesposa de Elijah planearon meterla a la cárcel, le pusieron una trampa.
—Leí su expediente, fue condenada a 50 años, pero solo duro cinco años, las pruebas que tenían eran tan precisas, incluyendo fotografías, sus huellas dactilares estaban en la mercancía.
—¿Por qué harían eso? No fue suficiente con venderla.
—Keres, el padre de Elijah, era el jefe de una organización criminal muy importante y tu madre sabia el peligro que tendrías en esa casa, no sé qué vio o que hizo; pero pensó que si estabas en la cárcel no te tocaría y quiero creer que su esposa lo hizo por celos. Claro Cristal pensó que ella la ayudaba de buena voluntad, pero la traiciono.
—¿Sabes como murió?.
—Sí, lo sé, aunque su familia no lo sabe, creen que fue una alergia por el Xinei, Elijah me lo contó y entre los dos limpiamos el nombre de Ana.
—Abuso de ella y la llevo al suicidio, se disparó frente a él, ¿Qué tan jodidos deben estar que aun en la tumba se quisieran deshacer de ella?.
—No entiendo, ¿A pesar de estar en la tumba?.
—La exesposa de Elijah, aun muerta, dejo órdenes que lo drogaran y…
—Hiciera eso, es una droga con la que estamos luchando, algunos carteles someten a las personas asi, es una droga muy fuerte y una vez que entra en su sistema la persona pierde el control, si él dice que le hicieron eso, tuvo que ser inyectada o ingerida.
—¿Por qué piensas que soy ella?.
—Esta cicatriz que apenas se ve en tu labio, te la hiciste cuando tenías 10, tienes un lunar en forma de luna debajo de tu pecho, además porque hice una prueba de ADN.
—¡Mientes! ¿Cuándo? ¿Por qué? ¡Por los dioses!— se me dificulta respirar —¿Estás seguro?.
—Sí, tu ADN estaba en el sistema y cuándo nos vimos extraje una muestra, sé que no debí hacerlo sin permiso, pero Keres necesitaba saber.
—Lo siento, puedes darme un poco de agua.
Asi que, aquí estamos, el agente hizo la prueba confirmando que Ana y yo somos la misma persona, con la diferencia que los recuerdos no están y soy más fuerte que nunca. Su pasado no me alcanzará, no somos la misma persona, no más.
—¿Por qué no se lo dijiste a Elijah?— le pregunto.
—Lo odio, es un bastardo que…— me mira —La decisión es tuya, no mía, aunque aún no sé cómo es que sigues viva.
—Yo tampoco.
—¿Qué quieres hacer con esa información?.
—Nada— miento —Ana murió, ella no soy yo y yo no soy ella, solo compartimos ADN, nada más.
—Bueno, ante la ley estás muerta, asi que te entiendo, sigue viviendo tu vida.
—Ben, ¿Seguro que soy ella?, buscaron mis huellas en el sistema y mi rostro también, pero no apareció nada.
—Me descubriste— se ríe —Compare el ADN, con el de Cristal— me muestra una hoja —Mira.
Reviso sus sellos, las firmas y al final reviso el resultado, 99.9% de coincidencia, asi que, fui vendida por mi propia madre, interesante realmente interesante.
—¿Puedo quedarme con esto?.
—Sí, es tuyo.
—Ben, no hables esto con nadie, puede que seas agente, pero yo soy Keres Thompson y créeme que si abres la boca, pagarás con tu vida.
—Aun asi, no diría nada.
—Bien— le digo —También debes saber algo.
—Dime.
—Me voy a casar con Elijah.
—¿A pesar de lo que te hizo?.
—Como te digo, esa persona no soy yo.
—¿Lo amas?.
—Sí, lo amo— amo su poder, amo su dinero, pero no a él.
—Solo ten cuidado, no es un hombre bueno y puede llegar a ser peligroso.
—También yo.
—¿Qué más quieres saber?.
—¿Cómo sabes del lunar?.
—Crecí contigo— se ríe —Y lo vi años después, cuando estuvimos juntos.
—¿Nos acostamos?— le pregunto sorprendida.
—Fuimos las primeras veces de ambos.
—Joder, joder, la señora me vendió como virgen y yo no lo era.
No falto decirlo, ambos sabíamos que si me hubieran vendido a otras personas todos estaríamos muertos.
—¿Cómo te accidentaste?.
—Íbamos a casa, cuando nos chocaron, al parecer no llevaba cinturón y bueno, resulte herida, el golpe me dio un dolor de cabeza horrible y debido a la cirugía, pensé que me paso algo.
—¿Cómo es que sobreviviste? Bueno, incluso como creaste una historia completa y creíble.
—Tuve una cirugía, pero nadie sabe como es que estoy viva y bueno, la persona que me opero me dejo todo listo, al igual que una herencia.
—¿Por qué no le preguntas?.
—Está muerto.
—Gracias a dios, no por su muerte, sino porque te dio otra oportunidad para vivir, tú me entiendes.
—Si claro, yo entiendo— me suelto riendo —¿Estás casado?.
—No.
—¿Quieres tener sexo?.
—Estás comprometida— me dice.
—Pero no atada, ¿Quieres tener sexo?.
—No, no quiere— dice Elijah entrando malditas coincidencias, guardo la hoja de inmediato.
—No creo que a mi novia le guste— se ríe nervioso —Pero gracias por tu propuesta.
—Lástima, te ves comible y delicioso.
—Me retiro, recupérate pronto, llámame si necesitas algo.
—Bye.
Elijah se me queda mirando fijamente y lo miro igual, lo reto con la mirada, si él no se cansa yo tampoco.
—¿Cómo te sientes?— pregunta desviando la mirada.
—Bien.
—¿Por qué estaba ese policía aquí?.
—No Elijah, tus celos aquí no van, ¿Por qué viniste?.
—Vine a hablar, a contarte más, a que me des una oportunidad.
—¿Por qué tu esposa hizo todo eso?.
—Mi padre me caso con ella a siendo menor de edad, no sé cómo se enteró de que amaba a Ana, supongo que ella se enamoró de mí como yo no lo hice, fue sobre Ana.
—¿Murió?.
—Lo hizo, al igual que todas las personas que la ayudaron.
—¿Las mataste?.
—Sí.
—¿Matarías por mí?.
—Quemaría el mundo por ti.
—Los agentes que la torturaron ¿Murieron?.
—Aún falta de localizar unos, pero sí murieron.
—¿La madre de ella murió?.
—No.
—¿Por qué no?.
—Porque no merece una muerte rápida, merece sufrir la muerte de su hija.
—Pero trabaja para ti.
—Sí, debe hacer su trabajo, fue un acuerdo cuando le entregue el dinero.
—Quiero vengarla— le digo —Me vengaré por ella, me vengaré a su nombre… —Eso mi incluye a mí.
—Cásate conmigo y dame todo lo necesario para vengarla.
—Lo haré, haré todo lo que me pidas.
Bien, eso, salió bien, Elijah, Elijah, te darás cuenta de lo malvada que puedo ser y mis advertencias estarán más sobre ti.