Greta se sentó en el salón de la villa, rodeada por los hombres de Simone, quienes le habían explicado con cautela los pasos a seguir para proteger el legado de su esposo. No pensaba ceder el control a su hermano, no pensaba darle poder en su territorio, eso sería la ruina, no solo para su esposo que yacía en una cama de hospital peleando por su vida, sino por todo lo que eso representaba. ¿Cedería ante él? ¿por qué? Le temía… pero no si estaba rodeada de sus hombres. A pesar de su nerviosismo inicial, se sintió decidida a tomar las riendas de la situación. Lo primero que hizo fue llamar a su padre, para que viniera a la villa cuanto antes, no pensaba usar a su hermano como intermediario, tenía que hacerlo ella, ¿no tenía el control? Entonces tendría que actuar en consecuencia. Neces