Se estaba convirtiendo en una situación muy complicada ¿Cómo es que, a pesar de poseer tanto poder adquisitivo en la región, continuaba con la idea de hacerse de más enemigos en la vida?
Desde mi punto de vista y casi que, de cualquier otro, David estaba sobrepasando sus propios límites y no estaba midiendo las consecuencias de las mismas al actuar de esa manera ¿Quién le compraría después la mercadería si eliminaba al caballo n***o? Era un punto lógico a mi favor, pero es cierto cuando se dice que la locura ciega la cordura y David estaba completamente ciego de locura al no darse cuenta que esas acciones eran perjudiciales para su persona.
¡Eso sin contar que literalmente en las piezas del tablero estaba arriesgando mi vida! Solo por servirle y por un sueldo que en ocasiones es mejor no codiciar y entregar la vida por ello sin razón y causa justificable alguna, de momento me encontraba en una situación difícil de asimilar y a la vez con la obligación de cumplir.
Tras su declaratoria anterior hacia mi persona, me quedo más que hacerle saber mi respuesta al respecto, nadie podría decirle que no, en mi caso no era la excepción.
—¡Por supuesto David! No te preocupes que se cómo es que se hace todo este tipo de cosas en el negocio. —Respondí mientras colocaba su mano en mi hombro.
—Sabes perfectamente que no soy mucho de preguntar algunas cosas en tus negocios, pero ¿qué es lo que ganaras con todo esto? Considerando que es un buen comprador y que aparentemente después de saber todos sus secretos, de seguro le darás de baja.
Acostumbraba a tomar wiski en lo que daba sus respuestas o de cierta manera me daba explicación al respecto, no puedo negar que se comportaba muy amable, pero sinceramente solo me comprometía más de lo que me sentía para ese entonces.
Así que, tomando camino hacia su lugar de descanso, se acomodó y tomo una copa de wiski para llegar a responder mi pregunta.
—¡Eres muy persuasiva Rubí y eso es específicamente lo que te hace completamente diferente y especial al resto del equipo! —Acercó su copa y bebió con delicadeza.
—Sucede mi princesa que de esta manera podría llegar a quedarme con el cartel de la frontera y todos sus lujos que son muy envidiables y sus rutas son aún más grandes que las mías, ¿Entiendes mis motivos?
—Me queda claro David. —Le hice saber mi respuesta sin titubear al instante.
Honestamente David no necesitaba nada de eso, pero Salomón de alguna manera si era el que constantemente le llenaba de inquietud sus pensamientos y lamentablemente cedía a las propuestas mal logradas de Salomón.
Por lo que, sin ánimos de interrumpir permití que continuara con su punto de vista como el jefe del cartel que representaba.
—Como sabrás y entenderás ¡Nuestro cartel se dedica específicamente a distribuir a grandes proveedores y unas rutas con las que también contamos por aparte y eso nos ha permitido llegar hasta donde nos encontramos ahora mismo!
No me cabía la menor duda que así fuese, pero no dejó de mencionar al respecto.
—Solo que en la vida nunca debemos permanecer o conformarnos con lo que poseemos, siempre hay que avanzar ¡Ambicionar más de los que debemos! Porque nunca se sabe el tiempo y las vacas flacas que con el tiempo puede traer.
Comenzaba a hacer lo mismo en cuanto a su manera de tratar las conversaciones, por lo que, tras tomar un pequeño trago de Whisky, tomé su mano y le mencioné.
—¡Con tu respeto David! Pero ¿Por qué mencionas vacas flacas? Si eso llegara a suceder tendrías como mínimo treinta años de solvencia económica, ¿Sera que de pronto alguien más está detrás de todo esto? —Pregunté sabiendo la respuesta.
Sonrió ligeramente a mi pregunta final, pero queriendo esconder la verdad de lo que en verdad sucedía, me respondió con un tono de voz más orgulloso.
—Siempre he estado a la vanguardia del negocio y debo sobrepasar mis propios límites sin importar a quien deba pisotear en el camino, ¡Eso incluye a algunos personajes que sabemos que están en problemas con nosotros desde hace tiempo, te hablo específicamente del Duque de Manchester! —Menciono con severo enojo al respecto.
—Eso quiere decir que solo deseas acaparar más mercado que el Duque, no parece mala la idea. —Intentó en ese momento desviarse de la pregunta, pero no estaba en mí, hacer que me pronunciara la verdad, por lo que deje que su mentira creciera.
—Todo esto Rubí es un proceso y estas logrando que con los trabajos que has realizado últimamente, existan personas que estén sumamente interesados en conocerte y no es porque lo sepas ahora mismo, ¡Incluso hay unos cárteles que han puesto precio a tu cuerpo y están más que dispuestos a pagar por ti lo que sea! con el único objetivo que trabajes para ellos, pero confió que, si en algún dado caso que no pueda darme cuenta de ello, ¿Tu no me abandonarías o sí?
Con toda certeza no abandonaría a David para mudarme a otro cartel, porque mi principal objetivo era escapar de todos los cárteles posibles, mi ruta de escape tenia nombre y apellido, solo que aún no lo sabía del todo, pero en su momento se llegaría.
Le hice saber a David lo que pensaba en se momento, con palabras serias y determinante que no le provocaran duda alguna a su corazón, porque si algo no se podría evitar era observar directamente a los ojos cuando era de asegurar la respuesta que necesitaba escuchar.
—¿Cómo podría abandonarte David? Eres la única persona que confió en mi desde pequeña, eres la única persona que creyó en mi potencial a pesar que ese potencial estaba opacado por la miseria y la pobreza en la que vivía desde ese entonces, nos brindaste las mejores oportunidades de vida con mi hermana al momento que nuestros padres fallecieron por situaciones que no olvido en lo absoluto, ¿Cómo podría olvidar que incluso pagaste mi deuda con Salomón?
Para ese momento ya comenzaba a fingir lágrimas, porque siendo muy honesta, con todo lo que hasta ahora me había tocado vivir, la deuda con David estaba más que pagada, pero no fue que hasta que conocí a Ariel, que mi vida encontró un nuevo sentido para vivir.
—¡No tienes que ser tan modesta Rubí! —Respondió David con la copa de Wiski en la mano y su rostro apenas mostrando el cansancio del viaje.
Sentí en ese momento que era el oportuno momento para solicitar ser liberada del grupo de Salomón, ¡Eso sin lugar a duda me daría mucha ventaja y confianza! Por lo que sin más se lo hice saber a David.
—Por cierto, sé que Salomón es tu hombre de mayor confianza, pero sinceramente ¡Nunca he confiado directamente en sus decisiones porque siempre resulta con acciones que terminan perjudicándome!
David se sorprendió al momento de escucharme mencionar lo anterior, por lo que con intriga y un rostro de sorpresa respondió con premura. —¿Nunca has confiado en sus decisiones? Eso sí que es nuevo para mí Rubí. —Lo bueno de todo ello es que recibí el mejor entrenamiento de tu parte y eso me ha ayudado a sobresalir y no permitir que ningún hijo de puta me humille, pero si desearía de alguna manera no seguir formando equipo con Salomón, si puedes cumplir esa pequeña petición ¡Te estaría aún más agradecida de lo que ya no puedo estar!
El brillo en sus ojos me hizo creer que no le fue indiferente mi propuesta, comencé a sospechar que algo se andaba llevando entre manos, por lo que en mejor oportunidad no pude habérselo solicitado, a lo que, tras levantarse de su asiento, me respondió dejando su copa de wiski a medio tomar y con una sonrisa que no me inspiraba confianza en ese momento.
—¡Haz el trabajo que te he encomendado con el maldito del mexicano y puedes tener la certeza que moveré esas piezas de mi ajedrez que te colocaran por encima de Salomón! —Eso sin duda me causó una enorme satisfacción.
—Podrás contar con tu propio grupo de escoltas de tu confianza y así mismo organizar tu propio comando, te daré la libertad que deseas para movilizarte y hacer tus propios negocios con mi mercadería, contaras con la libertad de movilizarte a tus anchas, eso incluye claro que aun necesito una persona que fabrique los fondos de los autos para exportar la mercadería, así que, de ser un alfil en mi asociación, te convertirás en una torre más de la asociación ¿Estamos de acuerdo?
Al escuchar su respuesta fui directa y concisa porque algo me hacía sentir en mi interior que David escondía algo que no me lo hacía saber aún, así que me arme de valor y le pregunte.
—¿Exactamente a quien te refieres con persona de confianza para el trabajo? No conozco a nadie que realice ese trabajo. —Eso causó que David me respondiera con firmeza tras mostrarme la espalda.
No era común que David se volteara para dar una respuesta más que importante, pero la expresión en su rostro me hizo saber que la persona a mencionar era más que conocida para ambos.
—¡Consigue que Ariel Montes trabaje para nosotros y tu petición se hará realidad de inmediato! ¿Creo que es un trato justo o no?