Tu sonrisa

07

Me quedé sola con el doctor Do. Le conozco desde hace varios meses, justamente desde que me enteré de mi embarazo. Coincidió con ser un buen amigo de Kenan. Eran amigos desde la escuela y fue agradable para ambos hombres reencontrarse en una situación tan "feliz".

Al menos era una situación "feliz" hasta ese dichoso día. Desde ahí supe que mi vida jamás volvería a ser como antes. Una parte de mi, murió con Kenan.

— Haelyn sé que es difícil, pero debes salir de esto y resistir por Kyree. Él te necesita y tú no puedes atenderlo como él se merece.

— Está bien, ya lo sé, Do. Iré a terapia y buscaré un trabajo, para poder pagar una niñera o algo.

— Ahora te hablo como amigo, y no como doctor sexy y apuesto. –Bromeo antes de ponerse más serio – Haelyn, si necesitas hablar, tomar un café o cualquier cosa, puedes hablarme.

— Lo tendré en cuenta, Do.

Ambos nos levantamos del asiento, él me acompañó hasta la puerta e incluso salió conmigo al pasillo.

Los dos nos quedamos mirando al chico pálido, quien estaba rodeado de enfermeras. Todas coqueteaban con el chico, veo que ya descubrieron de quién se trataba.

— No sabía que te juntabas con famosos de otras empresas, Haelyn.

— Solo me junté con Yunho y alguno de los chicos de su grupo y porque eran amigos de Kenan, si no, no les conocería… Y ellos, bueno, son mis vecinos.

— Medio mundo soñaría con tenerlos de vecinos y tú tienes suerte… Aún espero mi autógrafo de Kook.

Rodé los ojos ante el último comentario.

— Se lo pediré… Creo que debería irme.

— Te enviaré los pasos y horarios de las sesiones por mensaje. Sé que se te olvidará al salir del hospital.

Asentí, nos hicimos una reverencia y me alejé de él. Para ir en dirección al chico, quien parecía estar bastante incómodo con esas cuatro chicas. Es graciosa la situación, al menos para mi.

— ¿Mingi, terminaste con estas chicas? Tengo recados importantes que hacer, puedes seguir coqueteando por mensaje o al menos darme al bebé.

— No hay nada que continuar, solo le pedí a una de estas señoras una servilleta y se me abalanzaron todas.

Las cuatro mujeres lo miraron de mala forma. A ellas debió de sentarles mal el comentario del pálido.

— ¡Será egocéntrico el idiota! –Exclamó una de las enfermeras cruzándose de brazos.

— No eres el culo del universo, solo estábamos ayudándote. –Recriminó otra de las enfermeras.

— Los famosos de hoy en día no tienen respeto, encima que le ayudamos, nos trata de acosadores… –Continuó otra de las enfermeras sin tapujos.

— Se le subió la fama a la cabeza seguro. –Finalizó la última enfermera.

La cara de confusión y vergüenza del chico, me hizo el día. El momento más feliz de mi día, seguramente.

— Disculpen si estuvo fuera de lugar. Solo me incómodo el acercamiento tan repentino. Aún estoy aprendiendo a ser padre y me agobio bastante.

El enfado de esas cuatro enfermeras cesó. Ahora lo miraban con admiración. ¡Será mentiroso el muy idiota!

— Debo irme, pero de nuevo me disculpó con ustedes. –Sonrió de forma amable y tiró de mí brazo mientras empujaba con el otro el carrito en el que ya estaba Kyree acomodado.

Salimos del hospital casi corriendo, no hables hasta llegar a la plaza de aparcamiento en la que estaba su coche.

— Mentiste muy descaradamente… –Comenté mientras me ponía el cinturón.

— Tuve que hacerlo, esas cuatro parecían querer mandarme por un mal comentario.

— Normal si vas de egocéntrico… No vuelvas a decir que eres su padre, no quiero más problemas y menos que me acosen a mi, por relacionarme contigo.

— No exageres, hace años que no interesó a la prensa. Ahora están centrados en joder a Jay, molestar a Jimmy como solitario y acosar a Kook. Yo hay sobró, ya solo produzco música, no las canto o rapeo. Y si lo hago, no es en vivo, solo para grabarlas en el estudio.

El silencio se produjo en el coche, ni siquiera Kyree, que se que tiene hambre, está llorando. Decidí terminar con el intenso silencio, desde que mi vida son llantos, el silencio total me perturba.

— Así que, productor… Kenan también lo era, trabajábamos los dos en KJ Entertainment.

— Lo sé, el joven Zhou era un buen productor, trabajamos juntos en una colaboración con el grupo de Yunho y el grupo de mi empresa. Algunos de los chicos colaboraron.

— Lo recuerdo, Kenan me habló de ello en casa. Dos de los chicos de tu empresa colaboraron con dos de los chicos de nuestra empresa. Dos raperos y dos vocales.

— Fue un éxito, pero tengo entendido que a él no le dieron créditos por producirla… Yo apenas estuve con él, solo quedamos un día, el resto lo hicimos separados y lo juntamos todo en un mismo día.

— Así fue, no le dieron los créditos de la parte que él creó. Recuerdo que llegó a casa muy enfadado, pero ese mismo día se enteró de la llegada de Kyree… Por lo que prefirió no armar una bronca y lo dejó pasar. –Hice un parón al recordar lo feliz que estaba él, con la noticia del nuevo integrante de nuestra familia. Me dolía recordarlo. – Pero volvió a suceder, el día de su muerte, iba a quejarse a la empresa, porque de nuevo le habían quitado sus créditos, esta vez en una colaboración con JYT… discutí con él, por tal enfado que él tenía y por mi situación en la empresa y el resto ya lo sabes, un borracho al volante.

— En realidad siento eso, yo debí haber reclamado a la empresa y haberle dado sus créditos… pero no dije nada.

—Ya es pasado, no se puede hacer nada.

El silencio volvió, pero está vez fue corto. El volvió a hablar, mientras aparcaba el coche.

— ¿En qué trabajabas tú? Has dicho que también estabas en KJ entertainment. –Apago el motor, mientras se giraba curioso hacia mí.

— Llegué a aquí como estudiante y aprendiz de producción… Empecé como ayudante en algunas empresas pequeñas, Kenan era prácticamente mi profesor, o uno de mis tres profesores. Era el más joven y supongo que hubo feeling entre los dos.

— ¿Él te metió en KJ entertainment?

— Al principio del curso no, estuve todo un año de prácticas en pequeñas empresas de entretenimiento, concretamente por daegu. Y después para mis últimas prácticas entre en KJ entertainment, con él, como su ayudante.

— ¿Y porque lo has dejado? Tenías trabajo estable.

— No lo deje, ellos me dejaron a mi… Se molestaron conmigo por pedir la baja por maternidad supuestamente, antes de tiempo. Algo ridículo, ya que tenía informes médicos que dejaban claro que no podía seguir trabajando en ese momento… Estaba viuda, embarazada y con depresión y aún así, tuvieron la cara de despedirme.

— La gente es estúpida, en serio. Por eso no me gustan las personas.

Salió del coche, sin previo aviso. Imite su acción sin saber qué hacíamos en el parking del supermercado.

— ¿Oye qué hacemos aquí? –Pregunté mientras lo miraba sacar de nuevo el carrito y pelearse con él, para montarlo de nuevo.

— ¡Esto es una puta mierda! –Grito molesto cuando se le cerró de nuevo.

El pequeño Kyree, quien estaba en mis brazos sonrió al escuchar el grito del pálido enfadado. Tan pequeño y tan sonriente, eso es algo que me había dicho el doctor Do, para lo pequeño que es Kyree, se expresa bastante bien con sus facciones. Ayer cumplió sus tres meses y yo ni me acorde. Menuda madre le espera, espero que tenga buena paciencia conmigo.

— Vinimos a comprar unas cosas, debo hacer la dichosa compra de la casa y no se me da bien hacerlo… tú me utilizas de chófer y yo para las dichosas compras de Jin… también necesitaré tu criterio para otra cosa.

Era un buen trato, quieras o no, los chicos me estaban ayudando. Lo menos que puedo hacer, es llevarles su compra sana y salva, porque este cara de ir hacer las compras normalmente no tienen.

Creo que es de los típicos que lo compran todo por app de comida rápida…