Capítulo III

1266 Words
Nos encontrábamos en la sala de reuniones donde nuestro jefe ingresó con una cara que reflejaba felicidad. —¡Felicidades chicos y especialmente a ti Samantha!—exclamó con alegría—.No sólo hemos desenmascarado a Bueso a nivel nacional, sino también que nuestro ranking sigue creciendo—continuó diciendo—.Espero que sigan trabajando como lo han hecho hasta el momento. Con respecto a Bueso ha sido detenido, como lo habías mencionado Sam; él tenía una orden de captura que iba ser ejecutada unos minutos después de la entrevista—agregó mirándome por el dato extra que le había dado—.No sé como lo haces, pero esas fuentes que tienes son muy buenas—me felicitó. Sonreí ante sus felicitaciones, mis fuentes eran amigos que se habían graduado conmigo en la misma generación en la Universidad, ahora trabajaban para la policía. Es por esto que siempre tenía este tipo de información— .Cindy tu nueva sección de Cupido ha tenido buena cabida con el público, felicidades por eso—agregó el señor Collins con una sonrisa esta vez mirando a mi compañera—. Ahora haremos un breve resumen de las próximas noticias que publicaremos —finalizó mirando el proyector en la pared. Poco a poco Collins fue revisando el contenido de los próximos artículos que se iba a publicar entre ellos: Deportes, tip de belleza, farándula, invitados especiales, entre otros. Es por esta gran variedad de secciones que el diario ha tenido éxito ya que está dirigido a personas de todas la edades. Luego de la reunión mi jefe me dijo que me quedara un momento, ya que tenia un trabajo que darme—.Samantha te he conseguido una entrevista personal con Andrew Anderson, el próximo martes a las tres de las tarde en su oficina, ya que su compañía fue la más afectada con el fraude, sería ideal tener su opinión al respecto—me informó seriamente—.No habrá cámaras presentes así que sólo será una entrevista totalmente verbal y escrita, también debo advertirte sobre el carácter del señor Anderson, él es un poco.. difícil por así decirlo—recalcó esta vez mirándome fijamente, conocía esa mirada de mi jefe prácticamente me decía « se amable por el amor de Dios». —No te preocupes, sabré como manejarlo—afirme con diversión. Cindy, tenía a su cargo la sección de farándula, por sus secciones me he enterado que Anderson ha estado soltero durante un par de meses y eso ha generado cierto rumores sobre su sexualidad. La gente esperaba que siendo un hombre tan codiciado, atractivo y talentoso tenía que tener una fila de mujeres detrás de él, pero eso debía investigarlo dentro de cinco días. *** Pasaron algunos días, ingresé al edificio de inversiones Anderson, me sentía un poco nerviosa y no sabía muy bien porque. Llegue a la recepción para avisar sobre mi cita. La recepcionista me indicó el piso donde debía ir, tomé el elevador y llegué rápidamente al décimo piso donde fui recibida por la Secretaría de Anderson. Está me llevó a la puerta donde tocó antes de abrirla. Él se puse de pie para recibirme, él me vio de inmediato guardando silencio, parecía estar en otro mundo. Me había quedado impresionada al verlo ya que ahora con la luz que entraba por los grandes ventanales podía ver sus fracciones a la perfección. —Señorita Miller es un placer volver a verla—me dijo muy tranquilo y estrechándome su mano en forma de saludo. En ese momento reaccioné saliendo de mi trance. —Al parecer todavía me recuerda—respondí correspondiéndole el saludo, mientras Sentía la suavidad de su piel. —Cómo me iba a olvidar de la mujer que me ayudó con esas toallas de papel—musitó con una amplia sonrisa—. Por favor tome asiento, mi secretaría pronto nos traerá algo para tomar — dijo  señalándome la silla frente a su escritorio. Seguí sus órdenes, su secretaria ingresó nuevamente con dos tazas de café y galletas—.Gracias—le agradeció. Ella dejó las tazas sobre el escritorio para luego marcharse—.Muy bien señorita Miller, comencemos con la entrevista—me pidió tomando un sorbo de su café. Enseguida tome mi libreta y comencé con la primera pregunta. —Muy bien señor Anderson—comentó seriamente—¿Qué acciones tomará su compañía ante el evidente y público fraude realizado por el señor Allan Bueso?—pregunte mirándolo con detenimiento. Él dibujo una leve sonrisa ante mi pregunta.  —Mis abogados ya tomaron acciones sobre el caso, el señor Bueso pagará por sus actos como él se lo merece—contestó sin darle importancia al asunto. —¿Existe la posibilidad de que continúe con sus donaciones sociales a otras fundaciones o siente el temor que vuelva a suceder lo mismo ?—continúe con las preguntas. Anderson, se acomodó levemente en su asiento para luego responder. —Por supuesto que continuaré con mis obras sociales, claro que está vez tendré cuidado—afirmó —.Mi prioridad siempre ha sido ayudar a las personas que más lo necesitan, y no por culpa de personas como Bueso dejaré de hacerlo—respondió con sinceridad. Después de unas cuantas preguntas oficiales sobre las donaciones, me di cuenta que los rumores sobre su carácter no eran ciertos, ya que él me había tratado muy bien. Poco después mire de nuevo mi libreta pensando en mis próximas preguntas. —¿Le molestaría si le hiciera unas preguntas de su vida personal?— pregunte con curiosidad. Él se puso de pie para tomar su silla y arrastrarla hasta donde yo estaba. La puso a mi lado quedando frente a frente. —Por supuesto, a usted le respondería cualquier tipo de pregunta señorita Miller—contestó en un tono de doble intención, tenerlo tan cerca provocó que mis ojos se desplazarán hacia sus labios—.Le responderé todas sus preguntas con un pequeño juego—añadió Anderson con una alegría interna—.Con cada pregunta que usted me haga yo le haré una ¿Esta de acuerdo?—interrogó con diversión. Elevé una de mis cejas ante su propuesta. Esto parecía interesante. —Acepto señor Anderson—respondí muy segura, me gustaban los juegos y estaba dispuesta a seguir el suyo, luego me pidió que comenzará con la primera pregunta —¿Tiene pareja actualmente ?—interrogue en seguida. —No—contestó sin dejarme de mirar. Su respuesta por supuesto no me sorprendió, ya que era algo conocido por todo el país. Ahora era su turno de hacerme una pregunta. —¿Y usted tiene pareja actualmente señoría Miller ?—preguntó seriamente. —No señor Anderson— respondí tratando de sostenerle la mirada. Ahora era mi turno y sabia perfectamente cual sería la siguiente interrogante. —¿Son cierto los rumores que usted es Gay?—interrogue firmemente. Él rió ante mi pregunta, inclinó su cuerpo hacia mi, apoyó sus manos sobre los antebrazos de mi silla hasta quedar a pocos centímetros de mis labios . —Sólo hay una manera de responderle señorita Miller—musitó besándome de repente de una manera pasional. Su acción me sorprendió, al principio no le correspondí, pero él besaba tan bien que me deje llevar por sus labios. Ambos nos pusimos de pie, me apoye en el escritorio para seguir besándolo sin pensar en nada más, la excitación comenzaba aumentar al igual que algo dentro de mi que no pude identificar, ya que era como si ya lo hubiera besado con anterioridad y eso era realmente extraño.
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