Ron Respiré profundo y me moví mi rostro un poco, el olor a flores inundó mi sistema haciéndome abrir los ojos, estaba abrazado a ella, con mi cabeza en su cuello, parte de sus cabellos tocaban mi rostro, con su culo en mi pelvis, sus piernas enrolladas en las mías y su mano sosteniendo la mía en su vientre desnudo. Estábamos durmiendo de cucharita, abrazados, en su cama, luego de besarnos por al menos unos veinte minutos anoche, la había sentido contra mi pecho, había saboreado sus labios, me había vuelto loco por desnudarla y volver a estar dentro de ella, pero en lugar de eso, le había dicho que durmiera, que descansara, porque estaba enferma y no podía ser egoísta. Ahora las consecuencias se estaban clavando en la parte baja de su espalda, le estaba agradeciendo al cosmo estar vesti