Zahara conducía su auto, estaba por recoger a su pequeña Rossilene y llevarla a las clases de ballet que tanto deseaba iniciar. Iba por una carretera casi despajada, solo un auto venía siguiéndola, cuando sin más, aquel auto se lanzó contra ella. Zahara lanzó un grito, asustada, accionó el claxon, el auto tenía vidrios oscuros, y seguía intentando sacarla del camino. Zahara volvió a gritar, mientras luchaba por no perder el volante. —¡¿Quiere matarme?! —exclamó y tuvo un miedo horrible, ese auto estaba actuando con alevosía, con toda la intención de lastimarla. Ahora tenìa miedo, ¿Quién era capaz de deshacerse de ella? ¿David? ¿O alguien màs? ¿Quién màs era su enemigo? —¡Azael, Rossilene! —exclamó Zahara fue sacada del camino, luchó, por no caer, al final se estrelló contra un árbol