ENSÉÑAME A PECAR

Operación Oso Blanco

Alex Smith

Llevo mi traje de combate, estoy en la habitación de Sor Angela junto con 5 agentes infiltrados mas, no crean que entre en una operación en cubierto solo, somos varios pero Aurora solo sabe de mí y de Paola ya que nos conoció previamente…

–Tienen llaves de todos lados, van a entrar habitación por habitación sacando qa una por una, luego las encadenan como en la colonia cuello con cuello, para evitar fugas, ese es el plan que han revelado.–

–Tienen un sistema de comunicación obsoleto y nosotros somos los mejores hacker.– Dice Cristina a través de un auricular que tengo en mi oído derecho, es que ella no quiere morir en combate, ya que para eso tiene cero habilidades, la CIA le rogo que volviera y ella puso sus condiciones…

–¿Cómo esta tú familia?.– Le pregunto con camaderia, en la  ya que hay un poco de confianza entre los dos por haber combatido juntos en la Elite…Es la única que no intente follarme, digamos que su esposo es el francotirador mas rápido y certero que conozco en mi vida.

–Excelente, Christopher esta gigante.– Dice emocionada.

–Gracias a Dios esto termina hoy, si no era capaz de morir del aburrimiento.– Nos dice Carla y todos reímos, yo simulo reír, me hace falta una buena dosis de sexo, pero voy a dejar de ver a mi adorado tormento ¡Soy un idiota! No dejo de pensar en ella, y tal vez ella ya me supero…

Los nervios antes del combate están a flor de piel, no permitiré que nadie entre a la habitación de Aurora, mientras viva me asegurare de que nadie le haga daño.

–¿Pensando en Aurora?.– Pregunta Paola en tono de burla

–No es tu asunto Guerrero, no deberías estar aquí estas embarazada, vas a dejar calvo a Elias de la preocupación.– Le respondo para que cambie el tema y funciona.

–A mi nadie, escúchame bien, nadie me dice que hacer.– Dice respirando agitada es un tema delicado para ella detesta que la sobreprotejan, Elías lo hace sin que ella se percate, ¡tiene cinco guardaespaldas! Aquí…

–Gracias a Dios no tuvimos nada, no envidio a Elias para nada.–Suelto, haciéndole reir, por supuesto que es mentira a me me habría encantado ser el esposo de una mujer con los cojones de ella.

–Mentiroso, jamás has dejado de amarme.– ¿Si no porque hiciste la cagada que hiciste?–Se refiere decidir no tener nada con Aurora.

–Deja de soñar Guerrero, esa mujer en muy santa para mi, no habría podido satisfacer mis gustos.– Le explico.

–Lo mismo creo, eres un pervertido, no se te habría ocurrido hacer algo especial para su primera vez, eres lento para esas cosas.– Me restriega y tiene razón soy cero romance, pura pasión.

Entra un hombre y se sorprende al ver un grupo de gente vestidos con sotana y hábitos en la habitación

–¿Qué diablos hacen aquí?.– Pregunta apuntándonos, está totalmente vestido de negro

–La oración nocturna ¿Quién eres hijo mío?.– Respondo jodiendo y los demás se ríen a carcajadas

–¿Comieron payaso?¿Donde está Liliana?.–

–Acá .–Dice la agente, vestida con el hábito de novicia.

–Te vienes conmigo.– Le dice agarrándola de la manos, mientras observamos como a través de una maniobra inmoviliza a un sorprendido secuestrador

–Estas detenido por el delito de trata de blancas y tráfico de órganos.–, Esta gente no solo se dedica a vender mujeres y niños, lamentablemente, cuando ya no les sirven para prostituirlas sirven de “donantes de órganos” han aparecido muchas sin vida y sin órganos dentro de su cuerpo, son una basura.

Salimos y entramos cada una a una habitación diferentes, para someterlos uno a uno…

Entro a la habitación de Nelly y están abusando entre dos hombres de ella, sin importarle que se le nota un poco el embarazo. – Veo rojo de la Ira, se los quito de encima y acabo con los dos inmediatamente, A uno le parto el cuello, y al otro me divierto golpeándolo un rato mas…Mientras Nelly se cubre con una sabana y llora por lo que acaban de hacerle.

¡Ninguna mujer debe ser forzada!, no me importa si ella le gusta el sexo, no importa nada.

–Gracias lloriquea viéndome a los ojos.– La adrenalina y la rabia me invaden, voy a acabar con toda esta porquería de gente de una vez por todas.

–Estoy seguro que en este lugar se sentía segura, ve los cuerpos inertes en el suelo y tiembla de miedo, como si en cualquier momento se van a levantar para seguir la tortura, Necesito que te encierre en el baño, son varios.–

Ella asiente y se dirige al baño, veo con horror que esta sangrando, esta abortando debido a la rudeza con la que fue tratada, además tiene moretones y sangre en la cara, la golpearon fuerte para someterla, eran unos malditos, los escupo antes de salir, quisiera tener el poder de revivirlos solo para volverlos a matar.

Paola Guerrero

Estoy en mi habitación esperando que vengan por mi, entran cinco tipos y yo estoy preparada para matarlos

–No venimos a atacarte.– Dicen con las manos arriba.

–¿Quiénes carajos son ustedes?.– Pregunto echando fuego por la nariz literalmente.

–Tus guardaespaldas.– Me dice uno sonriendo al verme molesta.

–Elias se las va a ver conmigo cuando regrese.– Chillo molesta cuando entra un escuálido tipo al que someten antes que diga una sola palabra.

–¡Le quitan la diversión a todo!.– Me quejo, internamente estoy feliz de tener un hombre que me ame tal y como soy, ¡porque soy un poquito extrema para muchas cosas! Lo admito, pero solo internamente.

–Vallan a colaborar con el operativo..– Les ordeno, y ellos niegan con la cabeza

–¿No van a colaborar?.– Pregunto indignada.

–No podemos entrometernos, nuestro trabajo es cuidarla a usted.– Me dice uno, todos llevan la cara cubierta para que no los reconozca después.

–Si no van a ayudar no estorben, solo me cubren okey.– Le digo saliendo de allí, el escuálido de mi asaltante.

Salgo con mi beretta dorada en la mano, dispuesta a divertirme un poco…Al salir hay un montón de mujeres corriendo despavoridas de aquí para ya, el secuestro fue un fracaso, a lo lejos veo a Lucia entrar disimuladamente por uno de los pasadizos secretos, sabe que están descubiertos, me apresuro a seguirla corriendo y entro inmediatamente detrás de ella.

–Apenas entro, la mujer me recibe con una patada voladora que me lanza al suelo, esto no me lo esperaba, la subestime.

–Te vi, y no creí que fueras tú.– Dice en ruso apuntándome con un arma, la mía cayó al suelo

–¿De qué hablas?– Pregunto simulando estar agitada.

–No finjas conmigo ¿Qué hace el vor de la mafia roja, en un operativo del gobierno?–

–Soy un doble agente.– Le digo levantándome, cuando decide disparar ya perdió demasiado tiempo, de una patada le vole el arma de las manos y le di un golpe contundente en su hermosa nariz, la sangre corre escandalosa mientras la someto con facilidad

–Te voy a acusar con el gobierno.– Amenaza moviéndose como si tuviera una convulsión.–

Me carcajeo en su cara, –ellos son mis padrinos.– Digo descarada

–¡Me la vas a pagar!.– Amenaza y yo bostezo aburrida

–¿Sabes cuantos han dicho esa frase?, que cliché.– Respondo llevándola hasta donde estamos metiendo todos eso criminales, a vuelo de pájaro cuento veinte.

–Creo que se metieron con la gente equivocada.– .Le digo mientras lanzo con fuerza a la mujer, no veo a Daniels, ojala el desgraciado no se haya escapado.

Veo a Elías entrar, al convento con traje de combate

–¿Qué haces aquí?.– Pregunto, un poco molesta.

–Apoyando a mi esposa en todos sus caprichos.– Me responde dándome un beso que me trae mucha paz.

La madre superiora ve a todos lados sin llegar a comprender lo que esta pasando, se aprovecharon que era una mujer mayor para hacer por mucho tiempo lo que les daba la gana acá.

–Creo que se escapo uno– Digo con rabia.abrazada como un lapa a mi esposo, es demasiado bello y las mujeres que nos rodean están necesitadas de cariño, lo abrazo y lo marco como mío.