ANDRÉS Nunca me imaginé atravesar por una situación así, la nostalgia y la melancolía me invaden cada segundo más, desde que supe de la enfermedad no he podido dejar de pensar en lo caótica que ha sido mi vida desde joven, los problemas con mis padres, el desentendimiento de Dulce, mis vicios y mi manera de vivir la vida hasta hoy, quizá sea por todo eso que ahora estoy en esta situación, he estado desafiando al destino y ni siquiera me había dado cuenta. Nunca tuve hijos, que yo sepa, aunque no me extrañaría que algún día viniera alguna mujer a decirme que mis actos tuvieron consecuencias y me exija una cuantiosa pensión remuneradora por el tiempo que fui un irresponsable, suena mal, pero en estos momentos sería lo mejor que me pudiera ocurrir, un hijo, ¡eso sería algo maravilloso!, se m