FERNANDO Luna me pidió que la llevara a pasear a algún parque o algo así, Carmelita y la bebé nos acompañan, obviamente, no sé a dónde llevarlas, la verdad tengo miedo a que la gente me reconozca y me rechace, a veces pueden ser muy duros los comentarios y las críticas, suelen ser destructivos y aunque no me interesa el qué dirán, es un punto sensible para mí el que me acusen de haber matado a Giselle y al hijo que esperaba, en ocasiones, aún me pregunto si el bebé era mío o de su amante, o quizá, de alguien más, con eso de que nunca llegué a conocerla realmente. LUNA Noto a Fernando un poco nervioso, hace cinco minutos pasamos por una calle y él se quedó mirando hacia ese rumbo, quizá su antigua casa queda en esa dirección, pero no me atrevo a preguntarle, no deseo incomodarlo más, cre