Yanzatza- Zamora Chinchipe, Ecuador. Quince días después. Las mejillas de Paloma, habrían recobrado su color rosado, la joven ya podía dar pequeños paseos dentro de la casa, la muchacha solía pasar en la cocina ayudando a Citlalli, a preparar la comida; la melancolía aún invadía su corazón, la incertidumbre de no saber qué le deparaba el futuro muchas veces le quitaba el sueño; el amor que aún sentía por su esposo se estaba transformando en odio y eso no era bueno porque jamás pensó en albergar esos sentimientos cuando lo único que anhelaba era borrarlo de su memoria, arrancarlo de su alma, olvidar que alguna vez en su vida conoció a Iván Arellano; sin embargo, en su vientre albergaba el fruto del amor que ella sintió por él, era inevitable que lágrimas no brotaran de sus ojos cuando rec