—Tu conversación, es un anti stress para mí, Miriam; me hace sentir muy a gusto —le dice el— pero lamentablemente debo prepararme para salir, dentro de media hora pasaran buscándome; pasare la noche fuera de aquí; sí que no me esperes, vendré a tiempo para llevarte al trabajo. —Ay, pero míralo a él; tiene una cita de noche entera —exclama ella, mostrando una sonrisa sin alergia— me siento muy celosa, porque me dejaras sola por primera vez. —Ya Rebeca debe estar esperándome abajo —dice Fabián, saliendo de su cuarto, listo para irse. —Te ves muy bien, Romeo; casi envidio a esa chica —le dice ella, mirándolo de arriba abajo—déjame acomodarte el cuello; hueles muy rico, me gusta tu colonia. —Me voy, que tenga felices sueños, Miriam —le dice el despidiéndose, dándole un beso en la mejilla.